EDUCACIÓN, RELEGADA
TEXAS: la seguridad fronteriza tuvo prioridad en el presupuesto estatal aprobado por la legislatura.
Texas seguirá invirtiendo 800 millones de dólares en la seguridad fronteriza, asignará pocos nuevos fondos a escuelas públicas y mantendrá el mismo total de recortes a terapias para niños discapacitados, según el nuevo presupuesto estatal que fue aprobado por la legislatura controlada por los republicanos.
La medida presupuestaria de 217.000 millones de dólares enviada al gobernador republicano Gregg Abbot quedará quizá como una simple anécdota frente al encono de la sesión legislativa que concluye el lunes y fue dominada por una “iniciativa sobre baños” que afecta a las personas transgénero y las medidas antiinmigrantes sobre las llamadas “ciudades santuario”.
Los ánimos se fueron caldeando hasta el fin de semana. El fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, el director general de Apple, Tim Cook, y una decena de otros gigantes de la industria tecnológica enviaron el sábado una carta a Abbott en la que le piden que abandone la llamada iniciativa de los baños.
“Leyes de ese tipo son malas para los empleados y malas para las empresas”, reza la carta.
Los demócratas, maestros y defensores de los pobres en Texas advirtieron que el nuevo presupuesto ajustado para un estado en gran desarrollo —que tiene cuatro de las cinco grandes ciudades de más rápido crecimiento en Estados Unidos— tendrá consecuencias durante mucho tiempo.
Para echar sal a la herida, afirman, la Legislatura deja intactos 11.000 millones de dólares.
Sin embargo, una firme ala conservadora del Partido Republicano en Texas que está creciendo y siendo cada vez más influyente hizo sentir su peso en el presupuesto.
Encabezados por el vicegobernador republicano Dan Patrick, ex locutor de radio y conservador evangélico, los legisladores del Senado resistieron los pedidos de los moderados republicanos en la cámara baja para que se aprovecharan más ahorros de emergencia para equilibrar la desaceleración en el sector petrolero y canalizar más recursos a las aulas.
La disensión entre las facciones republicanas en la Cámara de Representantes y el Senado ocurrió el último fin de semana del mes debido a la “iniciativa de los baños” y amenaza con obligar a la Legislatura a una sesión especial.
Abbot, que a diferencia de otros gobernadores republicanos ha acogido las posibles restricciones de los baños respecto de las personas transgénero, no dejó entrever el sábado si mantendría a los legisladores en Austin.
A pesar de las tensiones, el presupuesto fue aprobado por clara mayoría en ambas cámaras, cuyos legisladores republicanos lo elogiaron por su austeridad responsable frente a la caída de los precios de energía.
Uno de los pocos aspectos de consenso bipartidista fue la asignación de 500 millones de dólares para nuevos recursos para servicios de protección infantil, que atraviesa por dificultades.
La legislatura, controlada por los republicanos, también aprobó una versión más moderada de la ley de identificación de los votantes y la envió al gobernador Abbott, luego que un juez federal fallara dos veces que la versión original trataba deliberadamente de suprimir los derechos de votantes de minorías.
Los cambios, aprobados el domingo, expanden la lista de formas aceptables de identificación en la ley original de 2011 para incluir tarjetas de pasaporte y documentos recién expirados. Aun así, las licencias de armas siguen siendo aceptables, pero las identificaciones de estudiantes no.
La nueva ley permitiría a las personas sin identificación sufragar una vez que firmen una declaración jurada, pero quien mienta en esa declaración podría ser acusado de un delito grave.
En abril, un juez federal reafirmó que la ley en su forma original era discriminatoria. Los demócratas quieren ahora que el juez fuerce a Texas a solicitar una autorización federal antes de cambiar leyes electorales, bajo la Ley de Derechos de Voto.