Buscan apoyo
Rob Solano, director ejecutivo de Churches United For Fair Housing (CUFFH por sus siglas en inglés) -entre otras organizaciones que impulsan la legislación-, está tratando de conseguir el apoyo de al menos 30 concejales para garantizar que el proyecto de ley se apruebe en votación, y evitar un posible veto del alcalde Bill de Blasio. Actualmente, 22 legisladores han firmado como copatrocinadores del proyecto de ley, según los registros del concejo.
El proyecto de ley añadiría una nueva sección a la constitución de la ciudad que exigiría que ciertas solicitudes que desencadenan el proceso de revisión del uso del suelo público de la ciudad —conocido como Procedimiento Uniforme de Revisión del Uso del Suelo (ULURP por sus siglas en inglés)—, incluya un informe de disparidad racial que examine aspectos como la demografía del barrio y las tendencias de desplazamiento. Esto se aplicaría tanto a los proyectos privados como a los públicos de rezonificación, incluidas las rezonificaciones iniciadas por la ciudad, que abarquen un mínimo de cuatro manzanas adyacentes, o cuando la acción de uso del suelo propuesta aumente la proporción de superficie construida en al menos 50,000 pies cuadrados o altere la zonificación del lugar en al menos la misma cantidad. Las conclusiones del informe se distribuirán al concejal del distrito en el que se encuentre el proyecto, a la oficina del defensor del pueblo y al portavoz del concejo, y se publicarán en internet para el público.
Disparidad racial
Según el proyecto de ley, el informe de disparidad racial tendría que examinar una serie de datos demográficos socioeconómicos existentes en un radio de media milla de la zona del proyecto, analizando aspectos como las condiciones de la vivienda existente, el número de unidades de renta estabilizada o regulada, los hogares agobiados por el alquiler (que pagan más del 30% de sus ingresos en alquiler), la media de alquileres en el barrio, así como los precios de las viviendas y las tasas de desalojo. También tendría que incluir los niveles de educación del vecindario y los ingresos de los hogares, y el solicitante también tendría que describir las tendencias raciales, étnicas y socioeconómicas de la zona durante los 20 años anteriores a la presentación de la solicitud.
Los proyectos
Los proyectos residenciales propuestos tendrían que mostrar los importes de los alquileres proyectados para todas las unidades, junto con un análisis de los ingresos de los hogares necesarios para permitirse esas unidades sin que los inquilinos se vean sobrecargados por el alquiler. El informe de los proyectos comerciales propuestos tendría que incluir los sectores industriales y las ocupaciones proyectadas, el número de puestos de trabajo previstos y los niveles salaria