Reserva “sin conexión” con el objetivo de proteger a la industria
■ Entre los argumentos de Cabildo Abierto para exigir la inclusión en el proyecto de la reserva al Capítulo II están el impacto, a su entender negativo, que el tratado iba a tener el ciertos sectores, como el de medicamentos, o los supuestos problemas en el acceso a semillas genéricas que podían sufrir productores. Los liderados por Guido Manini Ríos —en coincidencia con el Frente Amplio— advirtieron sobre la incidencia de la adhesión de Uruguay al acuerdo en el incremento en los precios de los fármacos de alto costo. Al respecto la ministra de Industria, Elisa Facio, dijo ante la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Diputados haber solicitado información a la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI). “Nos han señalado que, en su experiencia, no existe ninguna conexión entre formular una reserva del Capítulo II y proteger a las industrias nacionales”, aseguró la ministra, que agregó: “ningún estado ha formulado la reserva con el objetivo de proteger a las industrias nacionales”. Ante los legisladores Facio advirtió, por lo tanto, que para el ministerio que encabeza no resulta necesaria dicha reserva del acuerdo, pero que estaba dispuesta a acompañarla, en la medida en que eso contribuyera a conseguir la adhesión de Uruguay al tratado de patentes.
El canciller Paganini, por su parte, apuntó a que la proporción de medicamentos patentados frente al total de medicamentos considerados “importantes” es de apenas el 5%, y que el efecto sería solo sobre los fármacos patentados en el régimen actual. En Uruguay, según cifras oficiales, existen unos 5 mil medicamentos distintos.