Jill Biden, la profesora que seguirá ejerciendo
▃ Jill Biden, la flamante primera dama de Estados Unidos, hará historia al mantener su empleo de profesora, además de atender la oficina de la primera dama.
La esposa del mandatario, de 69 años, ha dedicado su vida a la educación. Comenzó como maestra de secundaria para niños con necesidades especiales y durante la vicepresidencia de su marido en 2009 compaginó una apretada agenda institucional con su trabajo de profesora de inglés en un colegio universitario en Virginia, donde como primera dama seguirá desempeñando su trabajo.
"Para mi es difícil considerar mi decisión en términos históricos, porque ya enseñé durante los ocho años en los que fui segunda dama", explicó en una entrevista con el humorista Stephen Colbert.
Pese a la intensa carrera política de Joe Biden, que intentó optar a la Presidencia en varias ocasiones y fue vicepresidente de Barack Obama durante ocho años, Jill ha desarrollado su carrera como docente y ha sido durante este difícil año una defensora de la importancia de los educadores durante la pandemia.
La primera dama obtuvo en 2007 un doctorado en educación.
Jill y Joe se conocieron en 1975 en una cita organizada por el hermano del ahora mandatario. Jill estaba aún terminando su grado de inglés en la Universidad de Delaware y se estaba separando de su primer marido. Joe
La primera dama formó un gabinete con 9 mujeres en 11. Julissa Reynoso será la jefa.
Biden venía de pasar tres duros años tras la muerte de su primera esposa, Neilia Hunter Biden, en un accidente de tráfico, en el que también falleció su hija Naomi, aún una bebé.
Contrajeron matrimonio en 1977 en una discreta ceremonia católica en la capilla de las Naciones Unidas en Nueva York.
Jill vino a reemplazar el vacío de la familia Biden para convertirse, no solo en esposa del entonces senador, sino también en madre para sus hijos, Beau y Hunter. "Puso las piezas de nuevo juntas. Me devolvió la vida y una familia", aseguró Joe Biden en una entrevista.
Tras cuatro años de matrimonio, nació la única hija de ambos: Ashley Biden, activista y trabajadora social muy cercana al recién investido presidente.
Jill, que creció en el seno de una familia de clase media en Filadelfia, ha intentado mantener un rol discreto e independiente de la política.
Sus estudiantes la llaman "Doctor B" y pronto se enfrentarán al dilema de tratar con la primera dama de Estados Unidos en clase.