Israel ordena el desplazamiento forzoso de 300.000 personas en el norte y sur de Gaza
Su operación en Rafah y reanuda su actividad en Yabalia, donde Hamás se reagrupa
Israel ordenó ayer el desplazamiento forzoso de unas 300.000 personas en el norte y sur de la Franja de Gaza, en paralelo a la expansión de su operación en Rafah, extremo meridional del enclave; y a la reanudación de sus actividades militares en Yabalia, en el norte, donde Hamás se está reagrupando.
Días después de la primera orden de evacuación en los barrios a las afueras del este de Rafah, que afectó a unos 100.000 residentes; Israel mandó ayer la salida de la población civil en los campamentos de Rafah y Shabura, y los barrios de Adari y Geneina; avanzando hacia el centro de la urbe, que acogía a 1,4 millones de desplazados. «Dondequiera que mires en el oeste de Rafah las familias están haciendo las maletas. Las calles están significativamente más vacías», señaló Louise Wateridge, portavoz en Gaza de UNRWA, que estima que unas 150.000 personas han huido de la ciudad desde el lunes.
A la población de Rafah, se les ha pedido que se dirijan al «área humanitaria» de Al Mawasi, una zona costera en el sur ya saturada de desplazados en tiendas de campaña improvisadas, sin agua corriente ni saneamiento, y a penas sin comida. El Ejército estima que esa pequeña localidad, que las agencias humanitarias consideran inhabitable, ya acoge a unos 300.000 evacuados de Rafah. Desde el lunes, el Ejército ha informado de «redadas selectivas» para capturar combatientes en el este de Rafah, mientras sus tanques avanzan por la carretera de Salah al Din, que separa la ciudad en este y oeste, desde el
cruce con Egipto. Están a punto de rodear toda la mitad oriental, entre bombardeos aéreos y artillería
que afectan a toda la gobernación causando decenas de muertos.
En el norte, Israel ha ordenado la salida de la población de varios barrios y localidades en tor
no a Yabalia, antiguo bastión de Hamás que ya sufrió una dura ofensiva militar en octubre al inicio de la guerra, y pidió su evacuación al oeste de la ciudad de Gaza, también hacia el Mediterráneo, al designar esas áreas como «zona de combate peligrosa».
«Esto tiene como objetivo reducir el daño a la población civil y alejar a los civiles de la zona de combate, de conformidad con el derecho internacional», señaló el Ejército, que justificó esa nueva orden de evacuación en Yabalia porque, según alegan, Hamás está reagrupando allí a sus agentes y reconstruyendo su infraestructura militar.