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ABONADOS A LA ÉPICA

El Bayer Leverkusen volvió a salvar la imbatibili­dad en el tiempo añadido para certificar su pase a la final de la Europa League

- S.F. // EFE

El sueño de conquistar el triplete por parte del Bayer Leverkusen sigue más vivo que nunca. Los de Xabi Alonso sufrieron en la vuelta de las semifinale­s de la Europa League, en un partido que llegaron a perder por 0-2 ante la Roma. Con ese resultado, el conjunto italiano forzaba la prórroga, una posibilida­d que se esfumó tras el 1-2, obra de Mancini, en el 82’, que se marcó en propia puerta. Con el pase a la gran final de Dublín prácticame­nte encarrilla­do, al cuadro germano le quedaba uno de los objetivos más ambiciosos y que ha ido surgiendo a lo largo de la temporada: mantener la imbatibili­dad.

Por lo tanto, cuando Stanisic marcó el empate a dos, en el 97’, la locura invadió a los jugadores del Leverkusen, que se abalanzaro­n sobre el delantero croata-alemán, ya que su tanto, había permitido ampliar la imbatibili­dad hasta los 49 partidos.

Lo cierto es que esta racha ha tenido ciertos aires que recuerdan a la épica del Real Madrid. Los blancos reforzaron el relato de la heroica este pasado miércoles, con un doblete de Joselu en el 88’ y en el 91’ que les permitió disputar una nueva final de Champions.

Y el Leverkusen ha mantenido su invicto logrando los últimos empates en el tiempo de descuento. En los últimos cinco partidos en los que el conjunto de Xabi Alonso coqueteó con la primera derrota del curso, los jugadores del conjunto alemán anotaron a última hora para no sumar el primer tropiezo de la temporada. Junto al empate ante la Roma, el Bayer empató a dos en casa ante el Stuttgart gracias a un tanto de Andrich en el 96’. Era el tercer encuentro consecutiv­o en el que salvaban la imbatibili­dad a última hora tras el 1-1 en Dortmund ante el Borussia con gol de Stanisic también en el 97’, y el otro 1-1 logrado en Londres ante el West Ham con tanto de Frimpong en el 89’.

Además, también en Europa League, el Leverkusen vivió una noche épica en casa para mantener la imbatibili­dad. Fue hace un par de meses, en la vuelta de los octavos de final ante el Qarabag. En el 93’ estaban eliminados, pero entonces llegó un doblete de Schick, que marcó en el 93’ y en el 97’ para pasar a cuartos, y para mantener una imbatibili­dad que tiene ciertos paralelism­os blancos, y que tiene como objetivo, mantenerse hasta final de temporada.

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El gol de Stanisic desató la locura en el minuto 97

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