Un desacertado Barça se la jugará en el Palau
En el peor partido en Europa del Barça, el Zenit ganó merecidamente y forzó el desenlace de la serie de cuartos en el Palau, el martes próximo
El Barça se jugará el pase a la Final Four el próximo martes (21.00) en el Palau después de caer en la pista del Zenit (74-61) en un partido donde el equipo ruso se comió al Barça en deseo de victoria ya que estaba obligado al triunfo para no quedar fuera. El desacierto en el tiro (4 de 19 en triples) y la pérdida del rebote (38 a 22) condenaron a un Barça que mostró muy poco espíritu ante un Zenit que salió a por el partido, y con un Pangos que puso la puntilla al Barça en el tercer cuarto (5838). El canadiense acabó con 22 puntos y 8 asistencias.
El Zenit, consciente de que se le agotaban las opciones ante el Barça, salió decidido a morir en la pista con su mejor arma, la defensa. Y Xavi Pascual preparó su `trampa' defensiva, con una zona mixta, con marcaje al hombre, primero a Abrines y luego a Kuric.
SIN IDEAS OFENSIVAS Los azulgranas, sin ideas de cómo atacarla, y sin una defensa agresiva, permitieron que el Zenit cogiera pronto el mando del partido (13-5), con un acertado Hollins y un agresivo Poythress (9 puntos). El Barça no tenía ningún ritmo ofensivo, con muchos problemas
El Zenit doblegó con justicia a un Barça, que tuvo un mal día en el tiro (4 de 19 triples) y en el rebote (38 a 22)
Pangos, en otro partido soberbio, apuntilló a los azulgranas. Solo destacó Calathes (19) y Higgins (13)
y fallos en tiros fáciles, mientras el equipo ruso, a base de una férrea defensa, y con movimiento de balón, llegó a irse de 14 (25-11), que Bolmaro redujo a 12 al final del cuarto (25-13). Con muchos problemas en ataque, el Zenit mantenía la renta con comodidad (30-13). Higgins pasó a dirigir el equipo pero el problema estaba en el poco acierto en el tiro. Mirotic lograba un triple -de nuevo estuvo muy fallón- y reducía la renta local a 10 (30-20). Pero esos malos lanzamientos (8 de 23 de dos), penalizaban demasiado al Barça. El Zenit, sin hacer tampoco un gran partido en ataque, controlaba el duelo al descanso (36-26). Un juego trabado, con mucho contacto físico, al estilo planeado por Pascual que claramente beneficiaba a los locales.
En la segunda mitad, el protagonista fue Pangos, que llevaba al Zenit a su máxima ventaja (44-28). El partido se torció definitivamente, con un Pangos imperial (12 puntos en el cuarto) ante un Barça hundido e incapaz de reaccionar, con 20 puntos abajo con un cuarto por delante (58-38). Maquilló finalmente la derrota (74-61), pensando ya en el decisivo partido del martes en el Palau que decidirá quién pasa a la Final Four. Todo a una carta.