HAGAMOS CUENTAS
CERRAMOS SEPTiEMBRE CON UNA CAídA dE UN 13,5 % EN lAS VENTAS RESPECTO
al mes anterior, lo que deja un acumulado de casi el 30% comparado con el año pasado. Estos datos despejan las dudas y dejan claro que el mercado de la industria automovilística cerrará 2020 con una caída que como mínimo rondará el 30 %, y que podría llegar incluso al 40 % en el peor de los casos. En número de coches vendidos supone pasar de un millón doscientos mil a menos de ochocientos mil.
Con este inventario y recopilando la información que las marcas nos proporcionan en las presentaciones, el análisis del futuro aparece con sabores agridulces. Por un lado, la nueva normativa de emisiones entra en vigor el próximo 1 de enero. Su aplicación se traduce directamente en un incremento del 5 % en los precios, ya que la nueva regulación reducirá beneficios fiscales en vehículos que ahora disfrutan de ellos. A diferencia de la mayoría de nuestros vecinos de Europa, España no asumirá esta presión fiscal. Y es que solo Chipre y Portugal están por delante de nosotros en caída de ventas. No olvidamos la importancia que tiene en nuestro país la bajada del turismo y su trágico presente.
Pero como hace falta optimismo en la situación que vivimos, es bueno recordar realidades que auguran capítulos positivos. La fábrica de PSA en Vigo, coloquialmente conocida como la Citroën, ha logrado el récord de más unidades construidas en su historia en el pasado mes. Y la factoría de Seat en Martorell vuelve a sus índices de facturación de antes del virus. Esto es un termómetro fiable del futuro más cercano. Un futuro en el que todos los que jugamos un papel, aunque sea pequeño, en el mundo del motor luchamos para que se cumplan las previsiones y que el mercado pueda recuperar un 20 % en 2021 y llegar a la normalidad al año siguiente.