“¿cómo se gana al barcelona? machacándolas”

Tras recoger todo el material del entrenamiento en el Z5 y subir la empinada cuesta de Zubieta, Nahia Aparicio (Tolosa, 2004) atiende a Mundo Deportivo con una sonrisa de oreja a oreja en todo momento. Es la felicidad y alegría reencarnada, la propia de estar cumpliendo un sueño, de estar tocando un título con el club de su vida con la punta de las manos, y de haberse convertido en pilar fundamental para Natalia Arroyo en su primera temporada como profesional. Es, aun así, muy autocrítica y mantiene los pies en el suelo.

¿Cómo va la semana?

Todo muy bien. Se nota en la gente que el sábado tenemos derbi, un partido especial, y encima en Anoeta. Fue muy bonito lo de la Copa y la gente tiene ganas e ilusión de volver a jugar ahí.

¿Usted se siente bien?

Muy a gusto. Poco a poco me estoy adaptando mucho a pivote. Me costó un poco al principio ese cambio de central a pivote pero ahora estoy a gusto. Estoy con ganas de seguir aprendiendo y darlo todo.

Antes del último derbi dijo en MD que no se veía de pivote. Desde

entonces ha jugado muy poco de central. Lo que son las cosas.

Sí (risas). Me veía de central. El cambio fue...uf. De verlo todo de cara a estar de espaldas al juego. Fui tomándomelo con calma. Yo soy muy exigente y a veces me ha fallado eso, cuando realmente hacía bien las cosas.

¿Qué le dice Natalia?

Que yo antes jugaba de pivote, que me lo crea. Que me lo tome con calma, que sé jugar ahí. Que no me exija tampoco tanto, que si juego ahí es por algo.

Ya lo dijo ella, que usted era tan exigente que se creía que jugaba mal cuando lo está haciendo genial.

Es verdad. Antes más eh. Sigo siendo exigente pero antes me frustraba mucho con los fallos y me anclaba en eso. Sólo me quedaba con eso mientras hacía otras cosas bien. Muchas veces te juega malas pasadas. El fútbol es seguir aprendiendo, darte cuenta de que eres capaz de algo. Que tendrás partidos malos pero que vales.

Y que de pivote tiene la red de tener a la zaga detrás.

Eso también es verdad (risas). Pero aun así si fallas, hay mucha

probabilidad de gol.

Vienen de no ganar al Betis pese a ser superiores.

Salimos... uf. No estuvimos enchufadas. Nos costó el inicio. Generamos muchos tiros y córneres pero el equipo no estuvo. No estuvimos frescas, el tiempo no ayudó, pero no son excusas. No estuvimos bien. Toca asumir.

¿Pesaban las piernas?

Pesaban, pesaban (risas). Pero no supimos jugar y perdimos dos puntos.

Ahora derbi. ¿Es diferente al haber perdido el de la ida?

Si ganamos estamos más cerca del grupo de arriba. Poco a poco hemos perdido puntos en partidos importantes. Tenemos que mejorar en eso, creo, porque estamos siendo un poco irregulares en ese sentido. Pero estamos con ganas de comérnoslas. Allí perdimos, fue un chasco pero hay que asumir que ellas jugaron mejor. Tuvieron mucho balón y aun así marcamos. Sufrimos mucho y tenemos que intentar dar lo mejor de nosotros porque están en buena racha ellas.

¿Puede influir lo mental por haber pasado ustedes a la final y ellas no?

No creo. Es a parte. En Liga están muy bien y en Copa les tocó el Barcelona que es muy difícil. Ellas están confiadas, ganando mucho e intentaremos frenarlas.

Es su primer derbi como local, y además en Anoeta. ¿Qué espera?

Justo coincide con Euskal Selekzioa y pena, porque mucha gente irá. Pero nosotras a lo nuestro. Yo, por mi parte, llevaré muchos familiares y amigos así que medio estadio lo lleno yo. Espero que haya buen ambiente, contra el Atlético la gente que fue nos dijo que disfrutó mucho.

¿Cómo se gana el derbi?

Sabemos cómo son, que tienen gente rápida arriba. Tendremos que comunicarnos mucho, defender fuerte y hacer nuestro juego. Que en los últimos partidos hemos optado más por otra cosa y aprovechar contraataques. Allí sufrimos corriendo bastante y ellas con balón. A ver si en Anoeta podemos hacer buen partido y hacerles sufrir.

En los últimos partidos sólo han perdido un partido, pero de los últimos seis sólo han ganado uno. ¿Se ve del lado positivo o del negativo?

Claro, la gente muchas veces me dice que no hemos perdido, pero es que hemos perdido puntos que tendríamos que haber ganado. Nos jode, nos pica perder contra equipos de abajo. A veces nos confiamos. Hay que mirarlo desde el lado de ganar todo lo que se pueda. Estamos octavas, hay que ganar, tenemos que espabilar.