“EL CORONAVIRUS NO HA FRENADO A PIRINEUS-BCN”
Ricard Font Jefe de la Oficina Técnica de la candidatura JJ.OO. 2030 Estamos en condiciones de ofrecer una candidatura sin hacer actuaciones estructurales grandes” En febrero de 2019 el COI nos dijo que con lo que teníamos podíamos hacer unos Juegos Olímp
➔ Ricard Font (la Seu d'Urgell, 1971) es uno de los hombres fuertes del sector de la nieve y de los deportes de invierno en Catalunya. Como responsable de la Oficina Técnica de los Juegos Olímpicos de Invierno Pirineus-Barcelona 2030, una de sus tareas era la de elaborar el dossier técnico, en el que se detallan sedes, infraestructuras y reparto de funciones. Con él ha hablado MD.
¿En qué momento se encuentra este dossier?
Vamos avanzando. Aquí el trabajo es ir viendo cómo se concreta la candidatura desde un punto de vista político. La aproximación técnica ya está hecha. El dossier tiene que acabarse y concretar cuando haya candidatura. No se puede definir dónde haremos las cosas si no hay una candidatura acabada y constituida y avalada por el COE, por el Gobierno español, catalán y por el gobierno de la ciudad de Barcelona como concepto Pirineus-Barcelona. Si todo esto no se constituye, el trabajo que se ha hecho previo es el de garantizar que técnicamente no hay ningún problema específico para organizar unos Juegos Olímpicos.
La pandemia de la Covid-19, ¿ha supuesto un freno muy grande en la candidatura?
No. El trabajo técnico se ha ido haciendo y se ha ido avanzando y trabajando en diferentes requerimientos. El trabajo se ha mantenido. Todo lo que hemos podido avanzar lo hemos hecho, ahora el punto de inflexión es cuando se decida que haya un paso adelante, y esto ya no depende de FGC. Estamos en condiciones de ofrecer una candidatura sin tener que hacer grandes actuaciones estructurales.
Pero, ¿cuándo tendría que darse este paso adelante, formalizarse?
El COI tiene tiempo para escoger una candidatura hasta siete años antes de celebrarse los Juegos Olímpicos en cuestión, que si son para el 2030 tiene tiempo hasta el 2023 para elegir a la candidata y estos son los plazos. A partir de aquí, como mejor posicionados estemos nos permitirá hacer un trabajo de explicación en el territorio, a la gente, un poco lo que nos pasa, pero, exactamente, dónde estamos, en el punto que es posible que si no tuviéramos pistas y espacios preparados siguiendo la nueva la filosofía del COI, sin hacer inversiones, ya no podríamos avanzar. La suerte es que el trabajo realizado en 2018 y 2019 nos permite decir que podemos ofrecer una candidatura sin tener que hacer grandes actuaciones estructurales para que se puedan desarrollar los Juegos. Y aquí estamos ahora. Cuanto antes tengamos un posicionamiento político, más opciones tendremos de que las posibilidades técnicas se puedan convertir en consenso social y de tener la candidatura.
El OK de los técnicos del COI Pirineus-Barcelona ya lo tiene, ¿verdad?
Ya en febrero de 2019 los técnicos del COI nos dijeron que con lo que teníamos podíamos hacer unos Juegos Olímpicos, sin necesidad de hacer más, sin hacer nuevos dominios esquiables. No haríamos ni una pista más y nos basaríamos en lo que tenemos. Y el COI nos dijo que no hagamos inversiones para poder acoger competiciones de bobsleigh o de saltos de trampolín, porque esto supondría invertir 200 millones que no tienen un retorno económico y social. Un aspecto que valoraron positivamente es que en un dominio esquiable como el de La MolinaMasella se puede llegar en transporte público y cuando les dijimos que deberíamos hacer el telecabina que sube desde la estación ferroviaria hasta arriba nos dijeron que esto lo planteábamos como una infraestructura de transporte público, no como una de esquí. No debemos generar ni un plan urbanístico nuevo. Nuestra filosofía de candidatura cumple con todos los requisitos de no crecimiento, de no infraestructuras sólo por los Juegos y que económicamente sean inviables.
¿Hay algún aspecto que haya cambiado o se haya reforzado? Se habló de la entrada de Aragón, de la posible de Andorra…
Tiene que concretarse. Técnicamente no nos hemos fijado en estos momentos en ninguna subsede aragonesa. La realidad es que tiene que haber una determinación política que diga que entra Aragón y si se decide que entra, habrá que ver cómo se sigue avanzando. Lo que nosotros hemos hecho hasta ahora es valorar que el Pirineo catalán y el entorno metropolitano de Barcelona técnicamente pueden acoger unos Juegos Olímpicos de Invierno con todas las disciplinas de hielo y de nieve, menos los saltos de esquí y el bobsleigh que ya acordamos que se quedan fuera del Pirineo catalán.
Las posibles sedes europeas de estos deporte, ¿son las que eran?, ¿están claras?
Todavía no está decidido. Hay bastantes opciones sobre la mesa y todas son válidas. La más próxima es la de la zona de Albertville (Francia), pero también podría ser Innsbruck (Austria) o cualquier otra opción.
A día de hoy hay una pata de la mesa que cojea, y es la del nivel deportivo, que debería aumentar su nivel para que los deportistas que compitan sean competitivos.
Éste es un tema básico. Cómo seremos capaces en diez años de tener deportistas que en el 2030 tengan posibilidades de lograr medallas olímpicas, tal como sucedió en los Juegos Olímpicos de Barcelona'92 con las 22 de la delegación española.
Es clave explicar la candidatura a la ciudadanía, que la entienda, que la haga suya.
Unos Juegos Olímpicos sólo pueden salir adelante si tienen el aval de la gente y éste sólo lo tendrás si con transparencia le explicas a las personas qué puede significar para el país y para las comarcas. Los Juegos Olímpicos pueden contribuir a hacer de Barcelona una zona de cero emisiones o una transformación desde el punto de vista de hacer la movilidad más sostenible, y en el Pirineo debe servir para desarrollar una economía derivada de lo que puede ser organizar unos Juegos, poniendo en valor los entornos naturales. Unos Juegos Olímpicos deben servir para trabajar en un desarrollo del Pirineo que debe decidir la gente del Pirineo. Es el momento que Barcelona con su fuerza global genere energía y oportunidades para el Pirineo. Tenemos la oportunidad de pensar cómo desarrollar el Pirineo, hacerlo sabiendo que un Juegos lo situarán en el mundo y sabiendo que hay que hacerlo de manera sostenible. Seguro que Barcelona hasta el 2030 organizará, por ejemplo, más Gran Prix (patinaje sobre hielo) y algún día veremos jugar a la selección americana de hockey hielo en Barcelona. Todo esto pasará. La ambición está y es indiscutible ●