El Halo divide a la parrilla
Alonso y Vettel, entre los que defienden este nuevo elemento
La FIA explicó ayer en rueda de prensa que el Halo ha sido el elemento de seguridad elegido para proteger la cabeza de los pilotos a partir de 2018 por la “influencia positiva” que habría tenido en los principales accidentes que se han producido en los últimos años. “Es el sistema más seguro, tanto para impactos contra otros coches u contra el muro, vuelcos y desprendimiento de objetos de otros monoplazas”, expresó la FIA, segura de que por ejemplo, esta solución habría servido para salvar la vida de Jules Bianchi, fallecido tras el grave accidente que sufrió en el GP de Japón de 2014 al impactar contra una grúa de 2.500 kg.
La seguridad parece un motivo suficiente como para que los pilotos se pusieran de acuerdo, pero las razones estéticas y las dudas que residen en relación a este elemento, sobre todo en cuanto a si será efectivo para proteger al piloto de objetos desprendidos de otros coches, hacen que la parrilla esté dividida en cuanto a la inserción del Halo. Una de las principales dudas reside en el tiempo de extracción de los pilotos en caso de incidente, que podría verse aumentado hasta los 9 segundos, aunque podría complicarse en función de cada situación. Lo que quiso dejar claro la FIA es que se trata del mejor sistema en este sentido de todos los que se han probado hasta el momento.
Cabe destacar que esta estructura en forma de V pesará 9 kg, lo que obligará a que se revise el peso mínimo de los coches. Habrá un único proveedor y los equipos podrán pintar dichos elementos para que altere lo menos posible la estética de su coche, además de poder colocar soluciones aerodinámicas de un máximo de 20 mm en la zona superior.
Después de muchos test, la visibilidad que ofrece es superior al del escudo probado por Vettel en Silverstone, que incluso mareó al teutón. “El Halo no tiene ningún impacto en la visión”, expresó Vettel, que como Alonso, ‘Checo’ Pérez o Vandoorne, se mostraron a favor de la decisión de la FIA. “En primer lugar está la seguridad. Si pudiéramos volver al pasado y salvar vidas de pilotos seríamos más felices. La estética no me importa mucho”, comentó por su parte Fernando Alonso, matizando que en el accidente que sufrió en Australia 2016 “habría tenido menos miedo con el Halo, ya que cuando estás en el aire, tu única preocupación es que algo impacte en tu casco”.
En el otro lado están Lewis Hamilton, Verstappen o Hülkenberg, con una opinión contraria especialmente por razones estéticas y por su idea de mantener el riesgo ya conocido de los pilotos. “Cuando estoy en el coche, sé que hay peligro. Es un riesgo que estamos dispuestos a correr. Si lo eliminas, los espectadores también podrían intentarlo”, expresó Lewis el pasado curso. “No queda más remedio. Es un sacrificio. Ni a la FIA le gusta como queda, pero en unos años ni lo pensaremos”, expresó Sainz
Según la FIA, “es el sistema más seguro” y “habría salvado la vida a Jules Bianchi”
Hamilton y Verstappen, los principales detractores del nuevo elemento