Susana Guasch Tour
La periodista cargó contra TV3 y Jordi Grau por no hacer espectáculo del tema
En laSexta, más que la aplastante derrota del Barça, están encantados con la ira de Luis Enrique contra el periodista de TV3, Jordi Grau. Ni con el dedo en el ojo de Mourinho a Tito Vilanova mojaron tanto pan. Susana Guasch, que estaba en el lugar de los hechos, en su tour para dar detalles de lo sucedido, ayer lo hizo también en el magazine informativo de laSexta ‘Más vale tarde’. Hasta dibujaron un croquis. Guasch cargó contra TV3 y Grau por no sumarse al culebrón y a su versión. Lamentó que Grau no quisiera entrar en directo en laSexta para contarlo. Y añadió razones oscuras: que la tele pública intentaba ocultarlo porque “TV3 es una televisión más hincha que la propia televisión del club. Entonces para ellos, claro, es como no poder soportar que el entrenador del Barça se ponga así con TV3” decía Guasch. Y añadía que a pesar de que Luis Enrique “iba a por él” le sorprendía mucho que “el propio Jordi Grau lo haya desmentido y dicho que no fue a por él” como si el periodista mintiera.
Después de que Luis Enrique perdiera los papeles, todos los compañeros de Grau condenaron duramente lo sucedido y, en directo, criticaron al técnico: lo hizo Xavi Torras, lo hizo Bernat Soler y lo hizo Maria Fernández Vidal. Los Telenotícies lo han explicado también. Que Grau no haya sumado al tour mediático es comprensible. No a todos los periodistas les gusta ser protagonistas, recrearse en conflictos extradeportivos ni convertir en espectáculo un incidente. Como profesional de una tele pública, el libro de estilo también limita estos circos. Fuentes de la redacción de deportes de TV3 confirman que el técnico volvió para increparle de nuevo a gritos, pero que Grau no sintió que el técnico “fuera a por él” con voluntad de agredirle. Que Grau no haya querido convertirse en la marioneta de laSexta (y otros medios) para atizar más a Luis Enrique y lamerse las heridas públicamente es respetable (y le honra). No es cuestión de barcelonismo o de no soportarlo. Tampoco de ocultar información. Se trata de profesionalidad e integridad personal, de no querer sacar las cosas de quicio y de sentido de la responsabilidad.