“PARA 2019 DESEO UN PALAU SIEMPRE LLENO“
El cambio de año es una encrucijada para el Barça Lassa, inmerso en la batalla por entrar en el playoff de Euroliga y por mantener su liderato en ACB. El técnico azulgrana, Svetislav Pesic, hace balance de lo vivido y marca una previsión de lo que está por llegar.
¿Ha progresado el equipo al nivel que esperaba en este momento?
Hasta ahora pienso que hemos hecho un gran trabajo y estamos contentos. En el Barça siempre se esperan títulos y la perfección pero es el mundo en el que vivimos y lo aceptamos. Tenemos seis jugadores nuevos y empezamos con problemas de lesiones en tres jugadores muy importantes que han ido mejorando en las últimas semanas. Poco a poco el equipo se ha completado pero este no es nuestro máximo. Cuándo vendrá nuestro máximo rendimiento es algo difícil de decir, también para mí. No me caracterizo por la tranquilidad pero puedo decir que en este momento me siento feliz con la actitud y el trabajo del equipo. Si me preguntan si la perfección llegará este año diré que no lo creo. Tenemos que mejorar hasta final de temporada y pienso que podemos hacerlo individualmente y como equipo. Si esta mejora trae también resultados deportivos, es algo difícil de prever ahora.
Una cosa positiva es que no hay lesiones importantes ¿Hay alguna clave?
Depende de la situación general de los jugadores. La organización del entrenamiento, de la vida privada, del médico, de la nutrición... es al más alto nivel en el Barça. Tenemos grandes médicos y una gran planificación y esto se nota mucho. Pero una cosa está clara: si nosotros entrenamos, entrenamos. No hay entrenamientos de regeneración como hacen otros entrenadores. El entrenamiento es el momento en el que te preparas con alta intensidad porque si quieres jugar con alta intensidad has de entrenarte así. Para mí, la mejor regeneración es que el jugador no tenga entrenamiento para limpiar su cabeza y hacer otras cosas que no son sólo baloncesto, como disfrutar del tiempo libre con familia o amigos. Esto regenera más que estar en el jacuzzi o el masaje.
El equipo ha funcionado bien cuando la defensa ha sido intensa pero ha faltado continuidad. Incluso dentro de un partido, como el día del Efes, llega por momentos...
La continuidad, sin controlar el rebote defensivo, no es posible. Contra Olympiacos perdimos pero también jugamos buena defensa. La defensa, sin embargo, se ha de completar cogiendo el rebote y tuvimos muchos problemas ahí. Ellos cogieron 21 rebotes ofensivos en nuestra casa. Esto no puede ser. Lo definitivo es que para la defensa se necesita tiempo, más tiempo que para perfeccionar el ataque. Porque en defensa, a este nivel, si un jugador de los cinco que están en pista tiene problemas, el rival te castiga. En ataque, a veces, puedes controlar el ritmo con dos o tres jugadores. La defensa es otra historia. Si no controlas todas las posiciones del rival, tienes problemas. Si controlas todas las posiciones pero no coges luego el rebote, también.
¿Le preocupó que el equipo en ataque no estuviera en sus promedios durante semanas atrás cuando se acumularon derrotas?
Todo los detalles son importantes pero al final tienes que meter y para eso necesitas buenos sistemas. Hay que encontrar siempre un balance entre transición y ataque posicional, y esto no es fácil. También es importante tener
“Hasta ahora hemos hecho un buen trabajo pero si me preguntan si la perfección llegará este año diré que no lo creo”
“Para mejorar la defensa se necesita tiempo, más que para el ataque porque implica a los cinco hombres en pista”
“Tenemos jugadores que son buenos en el poste y hay que usarlos. No creo que se pueda ganar sólo tirando de tres”
equilibrio entre basket interior y exterior. Tenemos dos o tres grandes jugadores que son buenos en el poste bajo y hay que usar esto. Por ejemplo, en el último partido ante Obradoiro olvidamos que Tomic estaba en pista en los primeros cinco minutos. Es importante tirar de tres puntos pero ¿sólo tirando de tres puntos puedes ganar? No estoy seguro.
Hay muchos equipos que apuestan por ello como Iberostar o Khimki...
El Khimki está construido para jugar con este sistema pero luego está Fenerbahçe que tiene un gran equilibrio entre juego interior y exterior. Zeljko (Obradovic) lleva cinco años en el equipo y tiene una continuidad parecida también a la de Pablo (Laso) en el Madrid. Si tienes esta continuidad es una ventaja para todos. No busco excusas con ello pero hay que pensar cómo reacciona un jugador cuando Pangos penetra si antes no ha jugado con él. Con estas cosas se necesita tiempo. Lo más importante para mí como entrenador es cómo reaccionan los jugadores a mis instrucciones y hasta ahora ha sido positivo pero vamos a ver. Seguro que si ganamos será mejor. Pero se juegan muchos partidos y no se pueden ganar todos.
Dice que esos equipos tienen continuidad y eso es una ventaja. No sé si Pesic trabaja para esa continuidad en más años. ¿Dónde se ve en 2020?
Mi filosofía de vida ha cambiado poco. Cuando me levanto por la mañana ahora estoy feliz por tener que ir a entrenar. Me motiva pensar que me esperan los jugadores. Cuando un equipo pierde muchos cuestionan la motivación que reciben los jugadores del entrenador pero ¿qué motiva al entrenador? El entrenador vive de esa motivación también y yo lo estoy porque tengo un buen grupo que reacciona a mis instrucciones, tenemos una buena atmósfera. Trabajar conmigo no es fácil pero los jugadores saben que yo intento mejorar cada día. Trabajo como si me tuviera que quedar aquí los próximos diez años pero no sé cuándo acabará mi carrera y mi trabajo aquí. Es posible después de este año, es posible después del próximo... Si veo que los directivos me quieren eso me motiva. Sé que un día tendré que empezar otras cosas en mi vida porque al basket le he dedicado el cien por cien. No podré entrenar los próximos veinte años más, quizá diez sí (risas)...
Los jóvenes del B tuvieron oportunidades en pretemporada pero luego no han aparecido. ¿Ve opciones de que pueda contar con ellas en lo que queda de campaña?
Tenemos algunos jóvenes con futuro y la LEB Oro es una liga muy competitiva para nuestro equipo B. La filosofía es que algunos talentos con futuro en el Barça pudieran entrenar en el primer equipo para que conozcan lo que es un equipo profesional, que puedan competir con jugadores como Heurtel, Tomic... y que asuman responsabilidades en su equipo. Si mejoran, por favor, quién va a decirles que no. Pero es algo que no depende de mí. Algunos han aprendido mucho y están en un buen camino. Los aficionados buscan un nuevo Navarro pero encontrarlo es muy difícil.
El otro día habló de las distintas actitudes de los aficionados y de los que vienen a esperar a ver que pasa en lugar de animar siempre. ¿Esto resulta incómodo?
Puedo entender muy bien a los aficionados del Barça. En los últimos tres o cuatro años hemos tenido diferentes cosas y, sin entrar a analizar, están un poco decepcionados porque esperan un basket para ganar y no lo han tenido. En la situación actual, esperan a ver qué ha cambiado con la llegada de Pesic. Han podido ver que se han cambiado cosas y hay ilusión pero una parte siguen a la defensiva y esperan. Ellos también saben que trabajamos, que tenemos ilusión y que también ayudan de otra manera. Pero esperan mejores resultados, es lo que quería decir. Tengo la sensación de que ahora tenemos una situación en el Palau mejor que antes, que los aficionados quieren ayudar al equipo y desde el equipo sabemos que no estamos solos. Será importante ahora que jugaremos más partidos en casa en Euroliga. Será importante que el rival tenga la sensación de que se enfrenta no sólo contra el otro equipo sino contra todo un pabellón.
¿Un deseo para 2019?
Primero salud, para mi familia, jugadores y aficionados. Segundo, que el Palau esté lleno siempre, desde el primero al último segundo
“Lo más importante para mí es cómo reaccionan los jugadores a mis instrucciones y hasta ahora ha sido positivo”
“Cuando me levanto por la mañana ahora estoy feliz por tener que ir a entrenar. Me motiva pensar que me esperan los jugadores”
“Trabajar conmigo no es fácil pero el jugador sabe que trato de mejorar cada día. Lo hago como si fuera a quedarme aquí 10 años”
“Algunos jóvenes están en un buen camino. Los aficionados buscan un nuevo Navarro pero encontrarlo es muy difícil”