Naomi Osaka no ‘soporta’ ser la nº 1 mundial
La japonesa Naomi Osaka está viviendo unos meses de vértigo a sus 21 años. De septiembre 2018 a febrero 2019, dos títulos de Grand Slam (US Open y Australia) y el ascenso al nº 1 mundial. Tras Melbourne, sorprendió comunicando que rompía con su entrenador, el serbio Sascha Bajin, explicando que “no antepondré el éxito a mi felicidad”.
Osaka comentó que quería estar rodeada por gente de su entera confianza y con la que se sintiera a gusto, y el balcánico dejó de serlo. Estrenó en pista su condición de nº 1 WTA, ya sin ‘coach’, perdiendo ante la francesa Kristina Mladenovic por 6-3 y 6-3 en la segunda eliminatoria del torneo de Dubai.
La nipona fue una máquina de cometer errores y mostró una crispación que explicó luego entre alguna lágrimas: “No me gusta ser el centro de atención, está siendo duro”, subrayó sobre su nueva popularidad. “No creo que necesariamente deba entender la posición en la que estoy (nº 1). El año pasado estaba muy lejos de poder llegar a la misma. La gente no me prestaba atención, algo con lo que me sentía cómoda”, confiesa Osaka, abrumada por la presión.
Su víctima en Australia, la checa Petra Kvitova, dice que “es la rival a batir y tiene que asimilarlo. Además, es tímida, como lo era yo de joven, así que la puedo entender perfectamente. Cuestión de tiempo” Ángel Rigueira