La izquierda reclama un «golpe de timón» a favor del catalán y el PP no se da por aludido
El portavoz ‘popular’ niega retrocesos y dice que «en este momento» no hay en cartera más medidas al gusto de Vox
El PP no se da por aludido ni se siente interpelado tras la movilización del domingo en defensa de la lengua catalana y en contra de los «retrocesos» en esta materia. A menos, ese el mensaje que trasladó ayer el portavoz parlamentario del partido, Sebastià Sagreras. Fue su respuesta a los grupos de oposición que, poco antes, habían reclamado del PP y del Govern un «golpe de timón» a la vista del éxito de la convocatoria que reunió a miles de personas en la Plaça Major de la capital balear
Sagreras dijo que «no ha habido ningún retroceso en derechos» desde que gobierna el PP y que el Estatut d'Autonomía, que reconoce el catalán como lengua propia de Balears, sigue marcando sus actuaciones.
«No es preciso ningún cambio de rumbo», dijo en respuesta a Lluís Apesteguia (Més per Mallorca) y Marc Pons quienes, previamente, habían instado a la presidenta Marga Prohens a dar este paso y a dejar de lado las propuestas de Vox.
Según la portavoz parlamentaria de este partido, Manuela Cañadas –que ayer dijo, sin dar nombres, que quienes apoyaron la convocatoria de la Obra Cultural Balear y Joves de Mallorca per la Llengua «se hacen fotos con los amigos de ETA»–, la convocatoria del domingo, «para nada», le hace replantearse sus posiciones en relación al catalán y la «libre elección de lengua». Las reacciones a la manifestación del domingo marcaron las comparecencias de los grupos previas al pleno de este martes en que la oposición planteará varias preguntas al respecto. Y esa fue la tónica, también en el resto de instituciones, donde PSIB y Més plantearán diferentes iniciativas. Su tesis es que el PP hace seguidismo de Vox, que «rompe con 40 años de consenso» y que está legislando al ritmo que le marca la ultraderecha.
En este sentido, y según informa Gemma Marchena, los regidores de Més per Palma defendieron el derecho de todos los palmesanos a vivir en catalán, también en su ayuntamiento». El edil Miquel Àngel Contreras advirtió que «la crispación en materia de lengua siempre regresa cuando gobierna la derecha» y que «Palma no se merece un alcalde que se deja guiar por los discursos del odio de la derecha antimallorquina».
Govern sin perspectiva
Sagreras no comparte en absoluto esta tesis y justificó las dos únicas medidas que, en su opinión, se han aprobado –y que son la supresión del requisito de catalán para acceder a puestos de la sanidad pública y el plan piloto para la elección de lengua– para añadir que «en este momento» no hay otras medidas sobre la mesa. Eso sí, no consideró descabellado pensar que ese partido, Vox, quiera ir más allá y que siga presentado propuestas que «no son las del PP». Por ejemplo, todo lo que tiene que ver con llamar «lengua balear» a lo que el Estatut define como catalán. Vox, incluso, llegó a señalar hace unos días que según sea el resultado del plan piloto para elegir lengua «apretarían las tuercas» y se pensarían si apoyaban los Presupuestos de 2025.
Incluso el exdiputado de Vox Francisco José Cardona indicó: «La lengua balear no existe».
Desde Més per Mallorca y desde el PSIB no se dejó pasar la oportunidad de pedir al Govern un «cambio de rumbo», en destacar la vitalidad de la ciudadanía en defensa del catalán, en augurar que habrá más movilizaciones y en pedir a Prohens que «tome nota» y no de deje arrastrar por la ultraderecha. Apesteguia y Pons –Negueruela, portavoz socialista, estaba ayer en Eivissa– recordaron que la estrategia del PP no es novedad y aludieron a precedente de Bauzá y la gran movilización en contra del TIL.
«Basta de ataques al catalán. Que escuchen a una ciudadanía harta de defender lo mismo desde hace años», dijo el ecosoberanista que indicó, en línea con el mensaje de la OCB, que el Govern del PP tiene que dejar de atender las demandas del «fascismo», en alusión a Vox.
Marc Pons no se limitó a la movilización del domingo y enmarcó ésta en algo que, en su opinión, es consustancial al Govern de Prohens: que «no ha pasado un año y ha perdido la perspectiva mientras aumenta la conflictividad está en la calle». Para Pons, «son muy graves estos ataques a la lengua» y afirmó que la «sumisión» del PP a Vox le hacía desatender «problemas reales» como la falta de vivienda o la presión turística y la «saturación» de zonas de Mallorca. En el pleno, hoy, se seguirá hablando de todo esto.
«No se ha retrocedido en derechos en este momento, no hay otras medidas sobre la mesa»
Sebastià Sagreras PORTAVOZ DEL GRUPO POPULAR