Malaga Hoy

Arranque cuesta arriba

España se deja empatar ante Grecia y no comienza de la mejor manera su camino hacia el Mundial de Qatar Morata puso el 1-0 en Granada, pero Íñigo Martínez hizo un penalti

- Enrique López

España no arrancó con buen pie su camino en busca de la clasificac­ión para el Mundial de Qatar 2022. La selección empató a uno con una pobre Grecia que se encontró con un penalti que no desaprovec­hó, un punto que celebraron como si de una victoria se tratase. El idilio de La Roja con Granada, donde siempre había ganado en las siete citas anteriores, terminó en un duelo en el que el combinado nacional dominó por completo, pero le faltó profundida­d y peligro de cara a la portería rival. Un problema que parece que sigue sin resolverse pese a la última goleada endosada a Alemania en Sevilla hace unos meses.

Como era previsible, el balón sólo tuvo un dueño, fue posesión de La Roja que ayer estrenó la segunda camiseta que vestirá en la próxima Eurocopa. Desde el inicio, los de Luis Enrique jugaron en el campo contrario, moviendo a los griegos de lado a lado y buscando las incursione­s por las bandas con dos laterales como Marcos Llorente y Gayá, que eran casi extremos, aprovechan­do los movimiento­s hacia dentro de Ferran Torres y Dani Olmo.

Los helenos sabían que sufrirían persiguien­do sombras y se pertrechar­on defensivam­ente con un 4-5-1. Su única esperanza era mantener su portería a cero y hacer daño en una contra o a balón parado. La otra opción era aprovechar algún error defensivo o en el pase de los zagueros y estuvieron cerca en el arranque, sobre todo por parte de Sergio Ramos, que cometió algún que otro error grosero en la entrega. España era consciente que debía tener paciencia hasta que el cansancio físico hiciera mella en su rival. Pero tanta insistenci­a fue dando resultado poco a poco. Antes del cuarto de hora, Koke gozó de un doble disparo desde el punto de penalti que repelió un defensor griego, mandando el cuero a saque de esquina. Fue el primer aviso.

El sistema balonmano, ese que consiste en pasarse el balón de un lado a otro pero sin profundida­d alguna, fue ganando enteros ante la dificultad para penetrar en el entramado defensivo previsto por John van’t Schip, el técnico neerlandés del combinado heleno. Los minutos pasaban sin que

Vlachodimo­s tuviera que trabajar en exceso. Pero pasada la media hora, el choque se fue animando.

Primero fue Dani Olmo el que, en el 32’, estrelló un duro disparo con la derecha en el larguero. Fue el anticipo del tanto que abrió el marcador obra de Álvaro Morata. El delantero de la Juventus, que realizó un gran desmarque, aprovechó un preciso pase de Koke, controló con el pecho y remató con la zurda sin dejarla caer para fusilar a Vlachodimo­s.

Se había hecho lo más complicado porque eso obligaba a Gre

cia a estirar sus líneas. Sin embargo, el guión del partido apenas varió pese a ir los griegos por detrás en el marcador. España siguió dominando y circulando con precisión y Grecia, a lo suyo, defender ante su escasa personalid­ad en el ataque. El tanto dio mucha tranquilid­ad, pero se insistió en buscar el segundo tanto para dejar sentenciad­o el duelo, aunque éste no llegaría. El primer acto se saldó con una posesión que llegó a rozar el 80% para los hombres de Luis Enrique. Un dato que dejó claro quién fue a por el partido y quién se dedico a correr detrás el esférico.

La superiorid­ad era manifiesta pero en una fase de clasificac­ión, cualquier gol es importante. De ahí que La Roja no cesara en su empeño de buscar el arco griego en el segundo tiempo, que arrancó con la novedad de Íñigo Martínez en el eje de la zaga por Sergio Ramos. Luis Enrique no quería que su equipo se relajara y le pedía presión a sus jugadores para recuperar lo más alto posible.

Pero cuando nadie lo esperaba, empató Grecia. Lo hizo gracias a un penalti muy protestado por los jugadores españoles que cometió Íñigo Martínez, quien despejó el esférico, pero levantó en exceso su bota golpeando con los tacos en la rodilla de Masouras. El capitán Bakassetas no falló sucediendo lo que nadie quería, que los visitantes se metieran en el partido. Con empate en el marcador, el técnico asturiano no se lo pensó y le dio la oportunida­d de debutar con la selección absoluta a Br yan Gil y Pedri. Savia nueva que deberá ser el futuro de La Roja y que entraron al césped de Los Cármenes para ofrecer descaro y calidad con el objetivo de cambiar la dinámica del choque.

Los de Van’t Schip fueron bajando sus prestacion­es físicas, y en el silencio del estadio granadino se escuchaba a los jugadores españoles animarse y comentar entre ellos que sus contrincan­tes estaban cansados. Pero pese a intentarlo con todo el arsenal ofensivo que había, lo cierto es que Vlachodimo­s no se tuvo que emplear a fondo, pues casi todos los intentos ofensivos no fueron entre los tres palos.

Luis Enrique se desesperab­a en la banda porque su equipo no encontraba la fórmula para hacerle daño un rocoso equipo que supo explotar sus virtudes, sabedor de su inferiorid­ad técnica. Apareciero­n los problemas físicos en los griegos con el único objetivo que frenar el ritmo del partido y que en la recta final no sucediera nada. Y los visitantes lo lograron pese a los intentos de Br yan Gil, que no paró de encarar por su banda. Un empate que sabe a derrota y que ojalá no se eche en falta.

 ?? AFP 7 / EUROPA PRESS ?? Morata remata con su pierna izquierda para anotar el gol que adelantaba a España en el marcador.
AFP 7 / EUROPA PRESS Morata remata con su pierna izquierda para anotar el gol que adelantaba a España en el marcador.
 ?? ANTONIO L JUÁREZ / EFE ?? Bryan Gil encara en su debut por la banda izquierda a Bakasetas.
ANTONIO L JUÁREZ / EFE Bryan Gil encara en su debut por la banda izquierda a Bakasetas.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain