Irán se ve obligado a acudir al FMI y pide el fin de las sanciones de EE.UU.
La crisis del coronavirus que ayer sumaba 429 muertos en Irán –75 en las últimas 24 horas– ha llevado al Banco Central de la República Islámica a pedir asistencia financiera al Fondo Monetario Internacional, hecho inédito desde 1962, y a reconocer las limitaciones en su servicio de salud como consecuencia de la “escasez causada por las restricciones al acceso de medicinas y equipos”.
El anuncio fue formulado por el ministro de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, que recordó en un tuit que la directora del FMI, Kristalina Georgieva, dijo que los países afectados tendrían apoyo a través de su instrumento de rápida financiación. “La dirección del FMI debe ponerse del lado correcto de la historia y actuar responsablemente”, escribió.
Irán está bajo estrictas sanciones económicas impuestas por EE.UU. después de que Donald Trump se retirase del acuerdo nuclear en el 2015. Esto incluye que todas las transacciones financieras con Irán están restringidas, lo que tiene graves consecuencias cuando el país necesita acceder a equipo médico para responder a esta crisis. Más de 10.000 personas han sido diagnosticadas con el Covid-19, pero médicos y funcionarios locales que han hablado con la prensa iraní ocultando su identidad aseguran que los casos pueden ser muchos más. Esto se debe, entre otras cosas, a la escasez de tests para detectar el virus.
Por otra parte, Zarif denunció ante la ONU que las sanciones estadounidenses están complicando al extremo la lucha contra el virus y reclamó su levantamiento “inmediato”. “Mientras el virus hace estragos en nuestras ciudades y pueblos, nuestra población sufre la campaña de terrorismo económico más severa e indiscriminada de la historia”, dijo el ministro en una carta al secretario general, António Guterres.
Según el recuento que hace diariamente la Universidad John Hopkins, Irán es el tercer país con más muertos en el mundo. En otro tuit, Zarif publicó un listado de la maquinaria y los suministros que necesita el sistema de sanidad iraní para responder a la crisis. Esto incluye 1.000 máquinas de respiración artificial y 3,2 millones de tests de diagnóstico. “Los virus no discriminan, tampoco debe hacerlo la humanidad”, escribió.
En un comunicado en su cuenta de Instagram, el director del Banco Central, Abdolnaser Hemmati, confirmó que había enviado una carta al FMI el 6 de marzo en la que pedía el acceso a 5.000 millones de dólares para afrontar la crisis sanitaria.