La gratuidad de las guarderías generaría riqueza y 154 millones de retorno fiscal

Más de 16.000 mujeres no tendrían que dejar el trabajo y 20.000 pedir reducciones

Mucho hablar de talento, productividad, formación, riqueza, pero los objetivos se escurren desde el principio. Lo exponía Anna Mercadé, directora del Observatori Dona Empresa i Economia (ODEE) de la Cambra de Barcelona, durante la presentación del primer informe que analiza el impacto económico que tendría la implantación de la gratuidad en las guarderías públicas de Catalunya. Se beneficiarían 16.000 mujeres que han tenido que abandonar el mercado laboral, más 20.000 que no tendrían que solicitar reducción de jornada sin desearlo, lo que supondría una recaudación fiscal de 154 millones de euros. Más de lo que costaría implantar la gratuidad.

El estudio analiza a fondo el mapa de la educación infantil de 0 a 3 años, no obligatoria ni gratuita, y su vinculación con la situación laboral presente y futura de las mujeres, y por tanto de la sociedad.

En España, el 51,8% de las familias no escolariza a sus hijos durante esta etapa debido al alto coste que supone. Centrando el análisis del impacto económico en Catalunya, el estudio dirigido por Carme Poveda indica que una política de gratuidad total con el aumento del 20% de las plazas públicas generaría 37.646 puestos de trabajo a tiempo completo, 790 millones en rentas salariales y, como se ha señalado, 154 millones en recaudación fiscal. Asimismo, se liberarían 160 millones de renta disponibles para las familias.

Este impacto, se indica, es claramente superior a lo que supondría ampliar el sistema y hacerlo gratuito, lo que costaría 160 millones, y los 18,8 millones que supondría la construcción de nuevas plazas.

La escolarización de 0 a 3 años en España está en la media europea, el problema es que el sistema de prestación pública es inferior. Tener hijos supone un fuerte impacto en los riesgos de pobreza de las familias, y especialmente en las mujeres. Esto quiere decir que no hay políticas públicas de apoyo. En los países nórdicos y en algunos del este, quienes tienen hijos son los que más se alejan del riesgo de pobreza, gracias a las ayudas.

Roser Xalabardé, presidenta del ODEE, entregará hoy el informe al presidente del Parlament, Roger Torrent, con el objetivo de que el análisis pueda trasladarse a las políticas públicas. Un análisis que incide en el impacto de género que tiene la falta de ayudas en las mujeres que deciden ser madres. La tasa de ocupación entre hombres y mujeres es muy similar cuando no se tienen hijos, y la curva empieza a divergir en cuanto se tiene descendencia: la ocupación masculina sube y la femenina baja.

Esto tiene repercusión a futuro porque perpetúa la brecha salarial y afecta a las pensiones. Asimismo, si se quiere hablar de las bajas tasas de fecundidad hay que hacerlo también de la educación universal gratuita de los 0 a los 3 años. Todo ello, según se recordó, junto a la necesidad de racionalizar las jornadas laborales y la ampliación de los permisos de maternidad y paternidad .

Entre el 2002 y el 2012 el número de alumnos en guarderías públicas en Catalunya aumentó, pero con la llegada de los recortes y las políticas de austeridad de la Generalitat la tasa de alumnos ha quedado estancada y ha descendido en el sistema público. Se habla de maternidad, pero con mucha hipocresía, concluyó Mercadé, porque la realidad es que quien es madre acaba penalizada.