Ana Botín
Presidenta de Banco Santander
El banco que preside Ana Botín, que obtuvo un beneficio neto de más de 6.500 millones en el 2019, está preparado para afrontar todas las consecuencias del Brexit y que el servicio a sus miles de clientes no se vea afectado.
La presidenta del Banco Santander, Ana Botín, defendió ayer que la entidad está preparada para atender en el Reino Unido tanto a los particulares como a las empresas por el Brexit. Sin embargo, las actuaciones que el banco cántabro ha tenido que llevar a cabo en el país para cuando llegue el momento definitivo de separarse de la Unión Europea ya se perciben en las cifras del grupo.
El banco ganó 6.515 millones en el 2019, un 17% menos que el ejercicio anterior, debido a que tuvo que hacer saneamientos por 1.737 millones. La mayor parte de ese ajuste se produjo por cambios en el fondo de comercio del Reino Unido por valor de 1.491 millones.
En cualquier caso, Botín aseveró que “estamos absolutamente preparados para cualquier escenario en el que se ejecute el Brexit”. “El Santander es un banco muy inglés, muy ligado a la economía del país”, añadió.
El Reino Unido sigue siendo un mercado relevante para el Santander, ya que se mantiene como el tercero, con una contribución del 11% sobre el total, pero el negocio ha retrocedido un 16%, hasta aportar 1.077 millones del beneficio ordinario atribuido. La locomotora del grupo sigue siendo Brasil, que representa el 28% del total. Brasil generó 2.939 millones, un 16% más; mientras que España se mantiene en segunda posición, al contribuir un 15% al grupo, con 1.585 millones, un 2% más que el ejercicio anterior.
Botín destacó que el Santander va a seguir centrado en sus diez mercados clásicos, entre los que también resalta México, que aportó 950 millones; Estados Unidos, con 717 millones, o Portugal, con 525 millones.
Preguntada por posibles fusiones en Europa y más concretamente en España, la directiva admitió que el BCE está instando a que se produzca una mayor concentración de entidades financieras en el ámbito de la Unión Europea, pero consideró que “con las actuales normas europeas resulta difícil hacer fusiones”. En cuanto a España, Botín aseguró que “no tenemos ningún plan y seremos muy rigurosos en este tema, aunque si surgiera alguna oportunidad que encajase con nuestro plan, se estudiaría”.
Respecto a la creación del nuevo Gobierno, Botín aplaudió que las decisiones se tomen por consenso, en clara alusión al acuerdo alcanzado entre los agentes sociales y el Ejecutivo para subir el salario mínimo a 950 euros. A su juicio, hay que hablar de “un crecimiento inclusivo”.
Dicho eso, la presidenta del Santander reiteró que hay que examinar el efecto de las reformas que el Gobierno de Pedro Sánchez quiere sacar adelante a lo largo de esta nueva legislatura. Botín criticó una posible subida de los impuestos a la banca, tal como defiende Podemos. “No somos el sector que más merece un impuesto específico”, señaló. Y para defender tal argumento, puso sobre la mesa que el banco que lidera es el que tiene la tasa efectiva fiscal más alta de toda Europa como grupo, ya que alcanza el 35%. Defendió que el Santander pagó en total 7.000 millones de euros en impuestos el año pasado, de los que 5.103 millones correspondieron al impuesto de Sociedades, pero no desveló la cifra concreta pagada en España. También criticó que se tenga que pagar impuestos dos veces por traer los beneficios de otros países, una medida que se está estudiando. Y puso como ejemplo que en Brasil ya se paga un 40% de impuestos sobre resultados. También defendió que no se pague sobre pérdidas. En su opinión, habría que crear un modelo tributario “en el que se pague impuestos donde se genera valor”.
En cuanto al dividendo, el consejo de administración del Santander va a proponer a la junta que, con cargo a los resultados del 2019, se eleve a 0,23 euros en total, de los que 0,20 euros serán en efectivo y 0,03 euros en formato dividendo elección (elegir entre efectivo o acciones nuevas). De esta forma, el dividendo total se mantiene igual que el ejercicio anterior, pero la parte cobrada en efectivo se elevará un 3%.
Ayer, las acciones del banco Santander se dispararon en bolsa un 4,41%, hasta los 3,71 euros por acción, con lo que se convirtió en una de las mejores jornadas bursátiles para la entidad desde la compra del Popular, hace dos años y medio.
DIVIDENDO El banco pagará 0,23 euros por acción con cargo a las cuentas del año pasado
TRIBUTACIÓN La presidenta critica la creación de un impuesto específico para la banca