Nadal pasa ronda
Nadal coge vuelo y Federer avanza en una cita incómoda
El australiano Matthew Ebden fue la víctima propiciatoria de Rafa Nadal, que pasó a tercera ronda del Open de Australia con una suficiencia que habla bien de la recuperación física del balear, aunque es pronto para saber si está ya a la altura de Djokovic y Federer.
“Esté como esté, el favorito número 1 en Roland Garros es Nadal. Lo mismo sucede en pista dura con Novak Djokovic. Y a mí, teniendo en cuenta los títulos que tengo, también se me puede meter en el mismo grupo de favoritos. Nosotros sabemos cómo ganar los Grand Slams”. La frase, certera, es de Roger Federer. El suizo la pronunció como una especie de manual de expertos tras acceder a tercera ronda. No fue su mejor día, pero solventó un partido incómodo ante el británico Daniel Evans.
Los clásicos son auténticos supervivientes, aunque ayer Rafa Nadal no tuviera que tirar de su vertiente épica para avanzar. Lo hizo cogiendo vuelo. El mallorquín doblegó con comodidad al australiano Matthew Ebden, 48 del mundo.
El balear jugó con solvencia, mostrando la eficacia de su nuevo tipo de saque. No cedió ni una vez su servicio, salvó cuatro bolas de rotura (tres en el primer set con 3-3 y una en el último juego del partido), conectó seis aces y solamente perdió diez puntos con su primer saque.
“Creo que he jugado un muy buen partido, sólido, pero no puedo hacer una comparación porque llevo tiempo sin jugar. Pero he ganado muchas derechas. Me falta mejorar mi revés y tener más confianza en mis movimientos”, declaró Nadal.
En tercer ronda le espera otra vez un rival australiano, Alex de Miñaur, hijo de madre española y padre uruguayo, y que vive a caballo entre Sydney, donde logró la semana pasada el primer título de su carrera, y Alicante. De Miñaur, de 19 años, sufrió para pasar en cinco sets, pero venció y acumula siete victorias seguidas. Ya se midió con Nadal en el último Wimbledon. El balear le derrotó en tres mangas.
Otro que tuvo que llegar al último set fue Roberto Bautista Agut. Desperdició tres bolas de partido en el cuarto, y en el quinto debió exprimirse para doblegar al australiano Millman. El castellonense continúa en forma, aún está invicto en el 2019 y le toca ahora cruzarse con Jachánov. También tendrá un rival de nivel Verdasco, que se las verá con Cilic. “No tengo nada que perder”, dice el madrileño. Es un experto en sorprender sin presión.