El jeroglífico argentino
Sampaoli sigue haciendo pruebas para rodear mejor a Messi de cara al Mundial
Hay un tuit que desde el pasado miércoles se ha convertido en viral en la red de los 280 caracteres. En una foto aparece la doble página del álbum de cromos de Panini destinada a la selección argentina. “Ya he completado el equipo de Argentina para el Mundial”, reza el texto. Pero en realidad sólo hay un cromo pegado: el de Leo Messi. La ocurrencia lleva más de 10.000 retuits y casi 30.000 personas han declarado que les gusta. Y si ha hecho fortuna es porque, hasta la fecha, tiene parte de razón. Hasta que se demuestre lo contrario, Argentina es Messi. El 10 del Barcelona clasificó a la albiceleste para Rusia en la última jornada con un hat trick en Ecuador, donde empezó perdiendo.
En toda la fase clasificación sudamericana para el Mundial entre Higuaín, Dybala (Juventus), Agüero (City), Ángel Correa (Atlético), Di María (PSG), Tévez (Boca), Lavezzi (Hebei), Pastore (PSG), Icardi (Inter), Lamela (Tottenham), Benedetto (Boca), Pratto (River) y Alario (Bayer) sólo marcaron 6 goles. Todos grandes delanteros en sus clubs. El Kun, por ejemplo, no logró ningún tanto en los 8 partidos en los que participó. Messi anotó siete dianas. Más que los otros 13 juntos.
A estas alturas nadie sabe a ciencia cierta qué equipo será Argentina el 16 de junio cuando debute en Moscú frente a Islandia. Un jeroglífico imposible de descifrar. De hecho, es un rompecabezas el once que se medirá hoy a Italia en el Etihad (20.45 horas) y más aún el que el martes se cruzará con España en el Metropolitano. “Lo tengo decidido pero aún no se lo he confirmado a los jugadores”, dijo ayer mismo Jorge Sampaoli.
Ahí radica uno de los problemas de inestabilidad de la selección albiceleste, que ha tenido tres seleccionadores en los últimos dos años. El Tata Martino cogió las riendas después de Brasil 2014 pero se fue tras perder dos finales de Copa América. Le sustituyó el Patón Bauza, que fue el técnico que más partidos de la clasificación dirigió, ocho, por seis de Martino y cuatro de Sampaoli, reclutado de urgencia.
El exentrenador del Sevilla, gracias a un Messi estelar en Quito, evitó el fracaso. Pero ahora Sampaoli se encuentra en la misma encrucijada en la que se han perdido todos sus antecesores: ¿Cómo rodear a Leo para que logre rendir en la selección
Leo Messi y diez
más. La selección argentina depende del talento del jugador azulgrana, como en el Barcelona?
El de Rusia es presuntamente el último Mundial en plenitud de Messi, eliminado en los tres que ha jugado (2006, 2010 y 2014) por Alemania. Y para Argentina, dos veces campeona del mundo, sería imperdonable desaprovechar al mejor jugador de la historia. De ahí la presión. Incluso el futbolista ha prometido peregrinar al santuario de la Virgen de San Nicolás de Rosario si gana. Sampaoli, un técnico que bebe de Bielsa, quiere consolidar en esta gira una forma de jugar. “Queremos que nos respeten y nos teman”, anuncia el técnico, que pretende ser protagonista y ya ha hecho varias pruebas –4-2-3-1, 3-4-3, 3-4-2-1 y hasta un 3-3-3-1– para hacerle más fácil la vida a Messi. “Leo está en su etapa de madurez, está en un momento de mucha responsabilidad y es el reflejo del equipo. Todo lo que hace el mejor del mundo potencia mucho a sus compañeros. Este equipo es más de Messi que mío”, admitió el entrenador.
La clave está en un centro del campo de elaboración que abastezca de balones a Messi. Di María parece fijo de interior ya que jugó los 18 partidos de la clasificación. Pero falta por decidir si el mediocentro será Biglia, Lo Celso, Mascherano o Kranevitter, que se ha quedado fuera de esta convocatoria. El otro puesto debería ser sí o sí para el sevillista Ever Banega, único por su toque aunque a veces caiga en la irregularidad. Lanzini está en la recámara. Por las bandas se incorporarán Tagliafico, Acuña, Salvio o Bustos como laterales. Porque delanteros no faltan.
Mientras tanto, en Argentina han crecido los dos últimos talentos de una cantera que no se agota nunca. Se trata de Lautaro Martínez y Cristian Pavón. El primero tiene 20 años, juega en Racing, es muy habilidoso y con muy buena relación con el gol (lleva 13). Ni siquiera ha debutado. El segundo es un extremo menudo de Boca Juniors de 22 años, que ya estuvo en los Juegos de Río y que se presentó en los dos últimos amistosos. Ellos aún hacen más complicado el jeroglífico.
PROTAGONISTA Y OFENSIVO “Este equipo es más de Messi que mío”, admite el técnico, que se centra en dar con una medular creativa
LAS DOS ÚLTIMAS SENSACIONES Los jóvenes Lautaro Martínez (Racing) y Cristian Pavón (Boca) son las perlas en la liga argentina