Emociones sobre la marcha
1. Hay alegría y expectación, menos que en otras ocasiones, pero el ambiente es festivo en plaça Universitat, llena de chicos de instituto y universitarios para defender la educación. Aún no había corrido la información que aparecía ya en los medios digitales: elecciones el 20 de diciembre. Tocadas las 12 campanadas se inician los discursos hechos de frases breves. “Contra el 155, en defensa del autogobierno. ¡La educación catalana no se toca!”. Aplausos. Empieza a correr el titular: esta vez, tampoco se llega a la tierra prometida. “No acataremos ninguna decisión del Gobierno central”, aseguraba la voz desde el micrófono. “Prepararos para el mambo”. No hay clamor.
2. Òmnium. Unos dos millares de chavales, acompañados de multitud de periodistas, se detiene en la calle Diputació, frente a la sede de Òmnium. Un trayecto con el popular “els carrers seran sempre nostres”, alguna canción para levantar el ánimo y gritos al helicóptero de la Policía Nacional. Decaimiento. Dejan claveles y cartas en el portal, con dirección Soto del Real. “La gent a la presó no vol eleccions”. La frustración se vuelve contra el partido del president. “Alerta PDECat, la paciència s’ha acabat”. Salen a recibirlos Agustí Alcoberro (ANC) y Marcel Mauri (Òmnium). Están cariacontecidos. No hay discurso de ilusión. Piden mantener la lucha en las calles de forma pacífica y no olvidar los presos. “Llibertat pels Jordis”.
3. Reemerge la energía colectiva descendiendo por Roger de Llúria. Se corea “President, volem ser independents”. Unas universitarias muestran su preocupación. “Nos están reprimiendo. Tenemos que pasar a la acción. En estas elecciones ya no se puede votar a PDECat, que nos ha traicionado. ERC se esconde detrás y la CUP sabe tocar bien las narices pero no vale para mandar. No nos queda nada”, se lamentan. “La calle, la calle será siempre nuestra”.
4. Comisaría de Via Laietana. Subida de tono. “Marxeu, aquí no maneu”, “Asesinos a sueldo”, “Este edificio será una biblioteca”, “No teniu presons per a tanta dignitat”. A la marcha ya se han sumado más manifestantes. “Si tienes un hijo subnormal no lo trates mal, hazlo policía nacional”, ríen ante los agentes.
5. Riadas de gente entran en la plaza Sant Jaume al grito de “Independència ja o Catalunya cremará”. Puigdemont anuncia su comparecencia y las críticas van directas al partido “traidor”. “La pau s’ha acabat a la seu del PDECat”. “PDECat, directe al gulag”. “PDECat, el poble no perdona”. La frustración dispara por doquier: contra la corona –“A los tiburones los borbones”–, contra los mossos – “por el sueldo obedecerán”, dicen en corrillos– y contra los medios sociales. “Prensa española, manipuladora”, acorralan al periodista de Antena 3 durante la conexión.
La mañana acaba. Algunos chavales se marchan, otros se quedan esperando... la salida del president, nuevas noticias que desmientan las anteriores. Buscan alguna respuesta que serene sus emociones.