Bankia rechaza que la nueva ley encarecerá las hipotecas
El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, se desmarcó ayer de otras voces del sector bancario al rechazar que los cambios propuestos por el Gobierno en el anteproyecto de ley hipotecaria conlleve la restricción en el acceso o el encarecimiento de los créditos inmobiliarios. “Me parece que es bueno que tengamos unas normas claras de futuro, transparentes, y que evitemos toda la litigiosidad en torno al sistema hipotecario”, aseguró Sevilla, durante la presentación de los resultados semestrales de la entidad, que arrojan un beneficio de 514 millones de euros, un 6,7% más que en el mismo periodo del 2016.
Bankia atribuye el incremento de su beneficio a la “fortaleza” de los ingresos de su negocio tradicional bancario –en buena parte a las comisiones “implícitas”–, junto al control de los gastos, las menores provisiones por la bajada de la morosidad y la caída de los activos inmobiliarios adjudicados por deudas. Sevilla destacó esta reducción –que ronda el 20%– y estimó que en los “próximos tres años” el banco pueda digerir el lastre del ladrillo.
El directivo de Bankia aseguró que hay “oportunidades” para que se privatice parte de las acciones de la entidad antes de que acabe el año. El ministro de Economía –el Estado posee el 66% de las acciones– apuntó hace un mes la posibilidad de sacar a bolsa en torno a un 7%. Sevilla defendió que es “bueno” retomar el proceso de privatización, una vez clarificada la fusión con BMN. Las juntas de accionistas de ambos bancos se reunirán a mediados de septiembre para dar luz verde a la fusión.