El auge de la tableta y el teléfono inteligente arrincona al ordenador
Las ventas llegan a los 260 millones de unidades comercializadas, como en el 2007
IDC apunta que el mercado remontó hasta marzo, pero Gartner sostiene lo contrario
¿Por qué comprar un ordenador si ya existen las tabletas y los teléfonos inteligentes? Si no se necesitan por un uso profesional, las funciones son las mismas. Además, los segundos suelen ser más baratos y más cómodos de manejar. La tecnología avanza, y estas máquinas, grandes y pesadas, no han sabido encontrar la manera de seguir el ritmo del mercado. Las ventas de estos aparatos se encuentran en niveles del año 2007, en torno a los 260 millones de unidades comercializadas.
Son datos de la consultora IDC, relativos al mercado mundial del año pasado. La compañía explica que las ventas de ordenadores empezaron a caer en el año 2011, precisamente cuando el teléfono inteligente empezaba a coger impulso seguido de la llegada de la tableta unos años más tarde. Entonces, los PC registraban récord de ventas, con 365 millones de unidades vendidas, una cifra que desde aquel año ha caído en torno a un 29%.
La consultora dice que el fenómeno es común por todo el mundo. En el último año, los principales descensos se registraron en las regiones de Europa, África, Oriente Medio, Estados Unidos y Sudamérica. También en China (aunque en menor medida), mientras que Japón y Canadá fueron los únicos países donde las ventas crecieron. Con respecto a las marcas, durante estos años de caída, las norteamericanas Lenovo y HP se han ido disputando el liderazgo de forma intermitente. El año pasado, sus cuotas de mercado mundial fueron, respectivamente, del 21,3% y del 20,9%. Las siguieron Dell (15,7%) y a mucha distancia, Asus y Apple, con cuotas del 7,4% y 7,1% del total de las ventas.
Pero resulta que esta tendencia a la baja se rompió en el primer trimestre del año. Según IDC, las ventas de ordenadores crecieron –aunque de forma incipiente– un 0,6%, con 60,3 millones de unidades comercializadas. Loren Loverde, vicepresidente del área de análisis y previsión de ordenadores personales de la consultora, comenta que el fin de esta larga etapa se explica por dos motivos: la actualización y la renovación de los aparatos antiguos, adquiridos hace cinco o seis años, y el reciente frenazo del crecimiento del mercado de teléfonos y tabletas.
Aun así, como suele pasar en estos tipos de análisis, las consultoras llegan a conclusiones diferentes. Y esta vez, Gartner ha pisado los incipientes brotes verdes que había hecho crecer IDC. Según esta segunda consultora, las ventas de ordenadores del primer trimestre siguieron su tendencia a la baja, dejándose un 2,4% con respecto al mismo trimestre del 2016, con 62,2 millones de ordenadores vendidos. La diferencia se explica porque IDC tiene en cuenta los Chromebooks (aquellos más sencillos que funcionan casi en la nube) y excluye las tabletas de Windows con teclado, justo lo contrario que Gartner. En cualquier caso, los datos indican que los ordenadores no son lo que eran y, en un mundo que quiere aparatos livianos y conexión en todas partes, el ordenador, fijo o portátil, pero a menudo pesado, parece que no tiene muchas posibilidades.