Arroces en Pals
Sol Blanc, una masía histórica con nueva dirección
Los inviernos del Empordà resultan largos y ventosos y muchos de los sueños e ilusiones de sus jóvenes restauradores, asentados en estos bellos paisajes, se desvanecen llevados por la tramontana. De ahí que 5 a Taula escudriñe cada año el territorio en busca de proyectos culinarios que merezcan nuestro interés, cocinas y lugares con encanto para darlos a conocer a nuestros lectores.
El restaurante Sol Blanc podría ser uno de estos lugares. Un proyecto renovado de la mano de Jordi Ribas y Sonia Labrador, provenientes de Can Ros en Girona, donde adquirieron una importante experiencia en la restauración.
Jordi es, pues, un buen conocedor de los fogones que no olvida dónde está y cuáles son sus clientes potenciales. Por este motivo Sol Blanc avanza con prudencia en su nueva carta de verano. Los platos, siempre apetecibles, se presentan generosos, correctos de punto y con un sabor tradicional que casi siempre es bienvenido. Las anchoas de El Xillu, los boquerones semicurados, la caballa en escabeche, los imprescindibles caracoles picantes o el caneló de rostit son platos ricos y bien acabados, sin fisuras ni complicaciones. Pero donde la cocina de Ribas presenta su máximo interés es en el abanico de arroces del Molí Estany de Pals. Los prepara a la cazuela, al estilo local, o en paella, como el delicioso arroz de espardenyes, el de calamar y pollo o su famoso arroz brutal, divertido y apetitoso ensayo con los ingredientes variando según el día. Sin olvidar otros platos de notable nivel como el catxoflino, guiso local de mar y montaña, el jarrete meloso de cerdo o las gambas de Palamós al ajillo.
Como pueden intuir, nada es nuevo ni se pretende. Pero todos los platos tienen su intención y reciben un buen cuidado culinario. Estos días se abre la terraza con la temporada de verano y también su cocina de brasas.
Un rincón bien ubicado, una cocina honesta y un producto seleccionado hacen de esta renovada masía una referencia en el entorno de Pals.