El 70% de la energía se importa
El sector del transporte depende del petróleo, y es el que más gasto energético supone
IEl transporte por carretera supone el 80% del consumo energético del sector, frente al 14% del sector aéreo, el 3% del ferroviario y el 3% del marítimo, por lo que se han priorizado planes y ayudas para una mayor eficiencia y sostenibilidad en este ámbito, con el objetivo de reducir las emisiones de CO2 un 20% en 2020
mportamos más del 70% de la energía que consumimos. El estudio El ahorro energético: un bien común, un esfuerzo de todos, del Instituto de Formación y Estudios Sociales (IFES), recuerda que España
ocupa el puesto decimoséptimo dentro de los países con mayor consumo energético a nivel mundial y el quinto dentro de la Unión Europea. Del total del consumo energético español, el sector del transporte es responsable del 40%; la industria, del 30%; el sector residencial, del 17%; el sector terciario, del 9%; y la agricultura, del 4%.
Reducir esta cifra para ser más eficientes es uno de los retos que tiene no solo España, sino el resto de países, ya que estudios internacionales han demostrado que si se mantiene el crecimiento de población actual, en 2050
habrá diez mil millones de personas
en el planeta, y los recursos naturales serán insuficientes para abastecer la demanda. En la memoria anual de 2013 del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), del Ministerio de Industria, Energía y Turismo, se destaca que el suministro energético en España se ha diversificado en los últimos años, con creciente participación de las fuentes energéticas renovables y del gas natural. El mismo documento recuerda que en 2009, por los efectos de la crisis económica, la demanda de energía primaria retrocedió un 8,5%, y que en 2013, el consumo bajó un 6% respecto al año anterior, a causa de la caída de la demanda de todas las fuentes energéticas convencionales, en particular, el carbón (32,1%), la energía nuclear (7,7%), el gas natural (7,5%) y el petróleo (1,9%).
Por otra parte, el consumo de energías renovables es superior a la media Europea, un 15,1% respecto El consumo de energías renovables en España es superior a la media de la UE, un 15,1% del total. del total y dos puntos más que en la Unión Europea, según los datos de
Eurostat, pero aún a cinco puntos de lo exigido por la Unión Europea: una contribución de las renovables del 20% en 2020. La energía eólica, la hidráulica y la biomasa cubren el 75% de toda la aportación renovable, y destaca el aumento, en los últimos años, de la
tecnología solar termoeléctrica, que alcanza el 11,1% del consumo primario de energías renovables.
Esta combinación de fuentes de energía ha supuesto que la dependencia energética de España, o sea, la necesidad de importar energía del extranjero, se haya reducido más de diez puntos entre los años 2008 y 2013, según datos de Eurostat recogidos por el Instituto de Estudios Económicos (IEE). En concreto, las importaciones pasaron de representar el 81,3% del consumo bruto de energía en el año 2008 al 70,5% en 2013. Sin embargo, España sigue estando entre los países de la UE con una mayor tasa de dependencia energética y muy por encima del 53,2% de la media comunitaria.
Una dependencia que nos cuesta cara, porque, según datos del Ministerio de Economía, el balance comercial –la relación entre importaciones y exportaciones– de productos energéticos, de enero a diciembre de 2014, supuso un déficit de 38.071,1 millones de euros, equivalente al 4% del PIB.
EL TRANSPORTE ES CLAVE
El transporte es el responsable del 40% del consumo energético global, ysu dependencia de los productos
petrolíferos explica la necesidad de importar energía, además de que contribuye a la emisión de gases de efecto invernadero. Este es uno de los motivos que han hecho que el Gobierno haya impulsado en el sector planes de eficiencia y sostenibilidad energética, así como los planes de transporte sostenible al centro de trabajo, las ayudas para mejorar la gestión de flotas de transporte por carretera y los cursos de conducción eficiente para conductores de vehículos industriales, por ejemplo, o los planes PIVE, para renovar el coche, y los MOVELE, para la compra de
vehículos eléctricos. Porque, dentro del sector, el transporte por carretera supone el 80% del consumo, frente al 14% del aéreo, el 3% del ferroviario y el 3% del marítimo.
Para mejorar la eficiencia energética en el transporte, el IDAE propone una serie de medidas en su II Plan de Acción nacional de Eficiencia Energética en España 2011-2020 ,en el que destacan tres ejes: un cambio hacia medios más eficientes, la mejora de la eficiencia de los vehículos y un mejor uso de los medios. Esto supone
mejorar los planes de movilidad urbanos y fomentar el uso del transporte
colectivo, el ferrocarril y el transporte marítimo, además de la renovación de las flotas, tanto de coches, camiones y autobuses como de barcos y aviones, y de trabajar para conseguir una
conducción más eficiente. Porque una mala gestión tiene costes económicos. Según un informe de Greenpeace, los costes externos del transporte por
carretera (como pérdidas de competitividad por las congestiones de tráfico, efectos sobre la salud de las emisiones de contaminantes, accidentes y contaminación acústica) se pueden calcular en alrededor de cuarenta y ocho millones de euros, equivalentes a un 7,5% del PIB nacional. Mientras que el ferrocarril solo supone el 0,94% de los costes externos, a pesar de que mueve el 2,6% de las mercancías y el 4% de los pasajeros. Y la aviación civil ,el 16,02%, aunque transporta el 0,6% de las mercancías y el 11% de los viajeros.