El Girona se encalla contra el Elche
partidos iban claramente en línea ascendiente, de aquí que Juan Carlos Unzué intentara dar continuidad al mismo once con sólo dos cambios obligados por las bajas del lesionado Jozabed y del internacional colombiano Mojica. Àlex Gallar y Maffeo fueron los encargados de sustituirlos delante de un Montilivi que nuevamente se mostró muy exigente con su equipo y que observó con lupa cada decisión de Ocón Arráiz, con un historial de actuaciones polémicas en contra de los gerundenses.
Lo que nadie se esperaba es que el Elche se pusiera por delante justo empezar. El equipo valenciano, prácticamente en la primera posesión que tuvo, elaboró una buena jugada de combinación que remató Ivan Sánchez con un chut lejano tan ajustado al palo que Juan Carlos no pudo detener.
El gol no despertó a un Girona que sólo tres minutos más tarde veía cómo el Elche podría haber marcado el segundo si no hubiera sido porque Qasmi, solo ante Juan Carlos, envió fuera un centro de Nino. Conscientes de que había que poner una marcha más, los gerundenses se convirtieron desde entonces en los dominadores del partido y las ocasiones menudearon, sobre todo por parte de un Gallar muy activo y con muchas ganas de ver portería.
Una de las más claras, sin embargo, la tuvo Gumbau en el minuto 20 después de una magnífica jugada personal de Gual pero Edgar Badia, muy bien colocado y muy seguro durante todo el partido, pudo rechazar. La tónica no cambió con el paso por los vestuarios y el Elche continuó cerrado atrás esperando sentenciar al contragolpe. Estuvo a punto de conseguirlo el mismo Ivan Sánchez por la derecha pero el chut salió demasiado cruzado.
Con el marcador adverso, Unzué volvió a recurrir a la carta Samu Sáiz como revulsivo pero esta vez no sirvió para cambiar el marcador.Al contrario. A la salida de un córner Ortiz marcó el gol de la sentencia con un cabezazo. Fue después de que el Girona tuviera la ocasión más clara para empatar mediante un remate de cabeza de Stuani que se estrelló en el travesaño y que habría podido cambiar el partido.
El segundo gol visitante llegó después de un remate de cabeza de Stuani que fue al travesaño