Más lejos de Europa
El Girona cae ante el Betis y ve cómo le anulan tres goles
A menudo los resultados en el fútbol se explican por una cuestión de dinámicas, y ayer se enfrentaban en Montilivi dos equipos con rachas inversas. El Girona, que ha acusado el último paro de selecciones como el que más, ya que desde entonces no ha ganado ningún partido, y el Betis, que últimamente cuenta sus partidos por victorias y que se ha convertido en el principal aspirante a la quinta plaza. “El rival más en forma de toda la Liga”, según palabras del mismo Pablo Machín en la previa del encuentro.
Los de Quique Setién le dieron la razón imponiéndose 0-1 con un partido lleno de oficio en el que el árbitro Jaime Latre acaparó buena parte del protagonismo al anular tres goles al Girona por fuera de juego, el último de ellos inexistente. Machín, que en la previa también había insinuado que cualquier cambio que pudiera introducir en el once después de caer goleado en Anoeta por 5-0 dejaría señalado a alguno de sus hombres, decidió apostar una vez más por su once de gala, a pesar de la carga de minutos que acumulan todos ellos y de que hubieran sumado sólo un punto de los últimos 9 posibles.
Portu, el hombre de la semana en Girona después de mejorar y ampliar su contrato con el club hasta el 2022, también fue protagonista sobre el césped al principio, cuando estuvo a punto de abrir el marcador en el minuto 6, sorprendiendo a la defensa bética con una pelota robada en ataque gracias a su fe inconmensurable.
También lo intentó Àlex Granell, que, disfrutando de un gran momento de confianza, tiró una falta directa que hizo lucirse al portero Dani Giménez, titular por la lesión de Adán. No estuvo tan bien el portero del Betis al cabo de unos minutos, cuando se complicó la vida en un control dentro del área, el disparo posterior de Stuani consiguió sacarlo la defensa bética bajo palos.
Pero los visitantes, que tampoco jugaron a verlas venir, fueron entrando poco a poco en el partido, y fruto de eso, una pelota perdida por Ramalho dejó solo a Fabián ante Bounou, que desvió a córner de forma providencial.
En una primera parte muy distraída también hubo tiempo para que el árbitro anulara por fuera de juego un gol de Juanpe, nuevamente después de una pelota parada servida por Granell. Y para que al cabo de unos minutos Joaquín, en una larga conducción al contraataque, asistiera a Loren, que definió a la perfección para marcharse al descanso con ventaja en el marcador.
Disconforme con lo que había visto, principalmente en los últimos minutos del primer tiempo, Machín introdujo dos cambios al descanso y sentó a Maffeo –que tenía una tarjeta amarilla– para dar entrada a Aday, y a Borja, que dejó su sitio al Choco Lozano. El Girona volvió a hacerse con el dominio del partido, y Stuani tuvo en sus botas la posibilidad de empatar con dos jugadas similares que, como en la primera parte, el árbitro anuló por fuera de juego, el último de ellos inexistente, lo cual provocó las protestas de la afición y buena parte de los presentes en el banquillo, entre ellos, Marc Muniesa, que vio la amarilla por protestar.
A partir de aquí, la crispación fue en aumento, y en los últimos minutos hubo de todo menos fútbol. La afición local, que, a pesar de la lluvia, volvió a llenar Montilivi con más de 11.000 espectadores en la grada, abandonó el estadio frustrada por la actuación arbitral y consciente de que probablemente acababan de perder el último tren para ir a Europa.
Y es que, a la espera de lo que pase hoy entre el Villarreal y el Sevilla, el Girona ya tiene la quinta plaza a ocho puntos.
PROTAGONISMO ARBITRAL El árbitro Jaime Latre se convirtió en protagonista al anular tres goles al Girona por fuera de juego
LA MAGIA DE JOAQUÍN El veterano Joaquín condujo el contraataque que sirvió a Loren el gol que significó la victoria bética