Un gran Reus Deportiu congela el Nou Estadi de Tarragona
Nàstic 1-Reus Deportiu 2 Goles: 0-1 Domínguez (38), 1-1 Álvaro Vázquez (73), 1-2 Vítor Silva (78)
Árbitro: De la Fuente Ramos (castellano), amonestó a Jiménez, Molina, Atienza, Carbonell y David Haro
Nàstic: Dimitrievski, Kakabadze, Jiménez, Molina, Gaztañaga, Juan Muñiz (Dumitru 64), Maikel M. (Omar 74), Matilla, Suzuki, Tete (Álvaro Vázquez 55) y Manu Barreiro
Reus Deportiu: Édgar Badía, Olmo, Atienza, Campins, Álex Menéndez, Juan Domínguez, Carbonell (Tito 76), Vítor Silva (Íñiguez 81), Fran Carbia, Yoda (David Haro 66) y Mayor
Ante más de 11.000 aficionados granas entregados, con el Nou Estadi en ebullición soñando en dejar atrás un curso y medio de sufrimiento, apareció el Reus Deportiu para amargar la vida al Nàstic. Siempre tuvo el partido el ritmo que marcaban los del Baix Camp, amos del balón, convencidos de que con sus armas podrían ganar tras cinco jornadas sin hacerlo.
Parece que tiene tomada la medida el Reus a este Nàstic, que llegó al derbi en una dinámica muy positiva fuera de casa, con dos victorias y un empate. En una jugada pésimamente defendida por los de Tarragona, tras un saque de banda, aprovechó Juan Domínguez un balón perdido en el interior del área, mal rechazado por Gaztañaga, para clavar el 0-1.
Con el marcador a favor, el Reus fue superior ante un Nàstic precipitado y ansioso. El mismo Nou Estadi que empujó a su equipo de entrada presionó con sus dudas a sus futbolistas. Pero en el peor momento apareció la calidad de Álvaro Vázquez, cedido por el Espanyol, para igualar con un espectacular cabezazo.
Cuando más felices se las prometía el Nàstic, con la victoria al alcance, el oficio y la garra de este Reus siempre generoso con el esfuerzo abortaron la misión grana. Tras protestar el Nàstic un posible penalti por una caída de Dumitru, la magia de Vítor Silva enmudeció el Nou Estadi (1-2). El portugués, que colocó por la escuadra un sutil disparo, tiene fútbol de Primera División en su pie derecho si no fuera por las continuas lesiones.
La victoria saca de la parte baja al Reus y deja frío a un Nàstic que deberá seguir trabajando para romper su pésimo rendimiento en casa. Ambos equipos tienen por ahora un pequeño cojín sobre la zona de descenso.