Ante las restricciones, compra de otro coche
VIENE DE LA PÁGINA ANTERIOR de contaminación no podrán acceder al espacio entre rondas todos aquellos coches que carezcan de la etiqueta ambiental de la dirección general de Tráfico (DGT). El problema que abre la alternativa preferida por los conductores es que los aparcamientos disuasorios en las estaciones a día de hoy son prácticamente inexistentes y los que podrían cumplir esa función no están preparados para absorber un gran volumen de vehículos.
Cuando la restricción a los coches más contaminantes pase a ser permanente –un escenario previsto para el 2020–, el 45% de los encuestados asegura que optará por adquirir un vehículo nuevo que cumpla los estándares de contaminación y le permita circular sin problemas, dejando claro que el coche es su modus vivendi y nada le va a hacer cambiarlo.
Otro aspecto recogido en el estudio y que abre un escenario cambiante para el futuro es que el 55% de los ciudadanos muestra interés por los nuevos servicios de coche compartido. Interesa especialmente el servicio de alquiler de vehículos por minutos que permite realizar un trayecto de un punto a otro de la ciudad, cogiendo y dejando el coche allí donde mejor le vaya al cliente. También se posiciona como alternativa, aunque en menor medida el coche compartido con otras personas que hacen el mismo trayecto, una opción que funciona con éxito a través de plataformas como Blablacar para desplazamientos de larga distancia pero que aún no es utilizado para el día a día. Eso sí, el interés por los nuevos servicios de momento no se traduce en su uso. El de más éxito es Avancar, utilizado por un 5% de los encuestados.
El informe que apunta estas conclusiones supone un paso adelante en la búsqueda de consensos entorno a una movilidad más sostenible. En la elaboración del estudio han participado tanto las administraciones implicadas (Generalitat de Catalunya, Àrea Metropolitana de Barcelona, Ayuntamiento de Barcelona, Autoritat del Transport Metropolità…) como el RACC y empresas privadas, entre las que se cuentan Seat, Abertis y Saba, entre otras. El RACC pedía la semana pasada un calendario consensuado a las diferentes administraciones sobre las restricciones a los coches más contaminantes. La concejal de Movilidad de Barcelona reconoció ayer que las cosas no se están haciendo a la una aunque se quiera dar esa impresión. “El consenso sobre el diagnóstico de la situación es total pero patina a la hora de concretar las medidas”, dejó caer Mercedes Vidal. Lo demuestra un hecho que también va de calendarios: el Consistorio reunió a su mesa contra la contaminación la semana pasada, la Generalitat lo hará la que viene y el AMB en julio.