Mas defiende los comicios del 27-S como una “consecuencia lógica”
Rull cifra en una mayoría absoluta de votos el reconocimiento internacional
El president de la Generalitat, Artur Mas, salió ayer al paso de las acusaciones lanzadas por el presidente Mariano Rajoy, y por el líder del PSOE, Pedro Sánchez, de que CiU y ERC mienten a los catalanes al prometerles unas elecciones plebiscitarias y aseguró que la convocatoria electoral del próximo 27 de septiembre “no es un engaño” como algunos aseguran, sino “la consecuencia lógica de una voluntad común y compartida entre mucha gente en Catalunya”. Y señaló que el verdadero engaño es “la intolerancia y la intransigencia en el diálogo con que nos hemos encontrado en los últimos años”.
Durante una visita a Sant Carles de la Ràpita, el jefe del ejecutivo catalán defendió que, “como nos dijeron que no por todos los medios, nos tenemos que espabilar como siempre lo ha hecho este país, y si tenemos instrumentos que nos permiten hacer eso y que la gente pueda decidir sobre su futuro, lógicamente los tenemos que utilizar”.
El president se quejó de que “en países democráticos sólidos y consolida- dos no lo habríamos tenido que hacer a través de unas elecciones”, y criticó que “no siempre haya interlocutores a los cuales les guste el diálogo, y todavía menos la libertad”.
Pese al tono de reproche, Mas apeló una vez más al diálogo y dijo que aún
SI N FI S U R A S Unió afirma estar al lado de CDC en todo lo pactado con Esquerra
se está a tiempo para entenderse. “Pedimos a nuestros interlocutores que se olviden de las intoxicaciones del miedo y de las apelaciones al engaño y se sienten en la mesa, de manera democrática y civilizada, para permitir que el pueblo catalán pueda decidir con li- bertad su futuro”, dijo. Y en clave interna pidió tiempo para llevar a buen puerto el proceso. “Hay gente que a veces haría las cosas a toda prisa o de cualquier manera, pero se trata de hacerlas bien y, cuanto más complicadas son, requieren más tiempo, que es la única manera de que salgan bien”.
A su vez, y con respecto al proceso electoral, el coordinador general de CDC, Josep Rull, consideró necesaria una mayoría absoluta de votos en las elecciones del 27 de septiembre, para lograr el reconocimiento internacional de una Catalunya independiente. En declaraciones a Catalunya Radio, Rull aseguró que esa mayoría absoluta de votos, y no sólo de diputados, “tendría una fuerza extraordinaria de cara a los próximos pasos, y a conseguir lo que es más relevante en todo este proceso, que es el reconocimiento internacional”. Y respecto a su socio en la federación, Unió, que no apuesta por la independencia, Rull indicó que hay una parte del itinerario de esta hoja de ruta que deberían poder compartir aquellos que están comprometidos con el derecho a decidir “sin defender explícitamente la independencia”.
Precisamente, el secretario general de Unió, Ramon Espadaler dijo ayer que “Unió está al lado de Convergència, y CDC al lado de UDC, en todo el acuerdo alcanzado con ERC para dibujar lo que resta de legislatura hasta el 27 de septiembre”. Espadaler se felicitó de que, pese a que algunas fuerzas políticas esperaban que tanto el Govern como el proceso “embarrancasen”, el pacto alcanzado permite “construir el futuro del resto de legislatura”.
Un pacto que el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, estaría dispuesto a trasladar al gobierno municipal, porque, según dijo en RAC1, “gane quien gane, tendrá que pactar con alguien”. Sin embargo, el alcaldable del ERC, Alfred Bosch, afirmó en TV3 que dicho pacto no se puede trasladar mecánicamente al consistorio de Barcelona.
PA C T O SÍ , PE R O N O PA R A TO D O Alfred Bosch dice que el pacto CiU-ERC no incluye los ayuntamientos