20 años y 295 días después...
Pau reaparece en la ACB ante el mismo rival con el que se despidió siendo el MVP de la final en 2001
Una de las jugadas icónicas de Pau Gasol, a la altura de la que protagonizó con los Memphis Grizzlies ante los Timberwolves con el mate en la cara de Kevin Garnett, llegó en su último partido en la Liga ACB. Fue el 21 de junio de 2001. Enfrente estaba el Real Madrid, el mismo rival ante el que reaparecerá hoy en la Liga Endesa. Era el tercer partido de la final. Recibió cerca de la línea de fondo como si fuera el base, dribló a Marko Milic, recorrió toda la cancha y asistió con un pase picado a Roberto Dueñas para que machacara a una mano. Pau se llevó el MVP de aquella final como había hecho meses antes en la Copa del Rey. En aquel Barça, el base titular era su actual entrenador, Saras Jasikevicius; su amigo Navarro ejercía de escolta; Nacho Rodríguez, actual responsable de la sección, era el sustituto de Saras y a los mandos estaba Aíto García Reneses. Aquel Madrid de Scariolo contaba con Raúl López, importantísimo en la actual recuperación de Pau, y dos de sus jugadores, Herreros y Alberto Angulo, son piezas clave en el organigrama de la sección.
«Veremos cómo se levanta Pau y si las sensaciones son buenas lo normal es que esté en el Clásico», comentó Jasikevicius después de la derrota ante el Bayern. Las sensaciones han sido buenas y Pau volverá a tener minutos ante el Madrid. El balance de lo vivido ante los alemanes es moderadamente optimista. Pau estuvo en cancha algo más de lo que se esperaba. Fueron 13:03 y se le vio muy activo de salida en ataque y necesitado de coger ritmo en defensa. La derrota fue lo de menos. «Las piernas estaban un poco pesadas y me faltaba chispa, pero he aguantado y he podido hacer cosas de las que estoy contento. Ahora, a seguir trabajando para hacerlo mejor, cometer menos errores y estar más fino, pero me he vuelto a sentir jugador de baloncesto», confesó en el Palau. «Ahora se trata de disfrutar desde el primer segundo hasta el último porque sé que igual no voy a ser el jugador decisivo que he sido durante gran parte de mi carrera», afirmó.
Su presencia fue saludada por Pablo Laso con un tibio «Pau Gasol es un gran jugador que se une a una gran plantilla». En el Madrid han estado más pendientes precisamente de los movimientos en su plantilla y del decisivo partido ante el Fenerbahçe que de lo de hoy en el Palau. La salida de Deck, la inminente llegada de Poirier y, según el diario «As», el acuerdo con el baskonista Henry han sido el aperitivo del Clásico.
El Barça es el único equipo que esta temporada ha podido con el Madrid en la Liga Endesa –82-87 a finales de diciembre de 2020– aunque los últimos cuatro Clásicos (dos de Euroliga, la final de Copa y el de la ACB) han caído del lado azulgrana.