La CNMV advierte del riesgo inversor
Casi 500 fondos registrados en España invierten en bonos de alto riesgo, renta fija de baja calidad crediticia y activos basura. Este repunte se produce en un escenario de bajos tipos de interés, que ha obligado a los inversores a apostar por productos financieros cada vez más arriesgados en busca de una rentabilidad difícil de lograr. Esta situación ha llamado la atención de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que advirtió del alto riesgo que suponen estas inversiones, que han aumentado un 47% durante 2019.
El presidente de la CNMV, Sebastián Albella, alertó de esta situación ayer, durante la presentación del II Observatorio del Ahorro y la Inversión en España, elaborado por Bestinver y el IESE. Lejos de alarmar, quiso restar importancia a la relevancia de estas inversiones que, de momento, no presentan una situación «preocupante» ni «significativa», aunque sí se debe estar «vigilante», dijo el máximo responsable del supervisor. Eso sí, Albella advirtió de que los folletos informativos deben advertir e informar explícitamente al partícipe del tipo de inversión y en qué clase de activos de alto riesgo está invirtiendo. En este sentido, la CNMV ha pedido a 200 de estas gestoras de fondos que incluyan dicha advertencia, aunque solo cien de ellas superaron el porcentaje del 25% de inversiones en productos dudosos. El presidente de la CNMV fue más duro cuando señaló directamente a fondos ubicadosenLuxemburgoeIrlanda –los que más se comercializan en nuestro mercado además de los españoles– como las entidades que han generalizado este tipo de prácticas de desinformación.
Aunque el importe comercializado de este tipo de carteras entre clientes minoristas todavía «no es relevante», algunas de las principales entidades de crédito han empezado a invertir en activos de más riesgo, fundamentalmente en el ámbito de banca privada. Todos estos activos suman un nada desdeñable patrimonio de más de 8.000 millones de euros, aunque la inversión en los de más alto riesgo, sobre todo en renta fija, supone sólo el 25%, alrededor de 2.000 millones de euros.