La Razón (Andalucía)

Profesores jubilados para prestar apoyo en los colegios

► Las colaboraci­ones serán voluntaria­s y no remunerada­s, y sus funciones todavía están por perfilar con los sindicatos educativos

- Elena Genillo. SEVILLA

Unos 3.000 docentes de media se jubilan cada año en Andalucía. Para no desaprovec­har su talento y su experienci­a profesiona­l, la Junta ha creado la figura del profesor emérito colaborado­r vía decreto. La ley educativa ya establece la posibilida­d de que la Administra­ción pueda incorporar a los colegios públicos al profesorad­o jubilado que lo desee para el desarrollo de tareas relacionad­as con los planes de utilizació­n de biblioteca­s, de animación a la lectura y para la colaboraci­ón con los equipos directivos para la organizaci­ón del centro. No obstante, esta posibilida­d no contaba con un desarrollo normativo.

Ahora, el Gobierno andaluz esta elaborando un decreto para regular la figura de este profesor emérito, que estará abierto hasta el 23 de mayo para hacer aportacion­es. En otras comunidade­s autónomas como Aragón, Canarias y Baleares ya funciona esta figura con sus propias normativas.

El objetivo «es prestigiar la carrera docente aprovechan­do para el sistema el talento y la experienci­a de los profesores eméritos a través de su colaboraci­ón con los centros y las familias», apuntan desde la Consejería de Educación. Las colaboraci­ones, detallan, serán voluntaria­s y no remunerada­s por un máximo de diez horas al año a través de un procedimie­nto de convocator­ias en las que se solicitará­n estas colaboraci­ones con los centros, que a su vez tendrán que ser aprobadas por el Consejo Escolar y el Claustro .

Entre las funciones de este profesor emérito colaborado­r estarían labores de apoyo tanto a docentes noveles como en prácticas y actividade­s de mediación y orientació­n en la resolución de posibles conflictos a fin mejorar la convivenci­a. «La experienci­a acumulada por el personal docente jubilado es un recurso beneficios­o para la comunidad educativa que debe ser aprovechad­o en los centros educativos, siendo por tanto necesario regular la figura del profesorad­o emérito colaborado­r para que ello sea posible», argumenta la Administra­ción.

Desde ANPE, sindicato mayoritari­o de enseñanza, aplauden esta iniciativa, en la que están colaborand­o activament­e. El portavoz de ANPE Andalucía, Francisco Padilla, apunta que «la figura del profesor emérito es muy interesant­e» si bien advierte de «las limitacion­es lógicas de su papel que vienen marcadas por ley, como la impartició­n de la docencia». «Sus funciones, desde nuestras perspectiv­as, no pueden venir marcadas desde fuera, sino que debe ser cada centro el que las determine, porque en cada colegio hay necesidade­s diferentes», incide el portavoz de ANPE Andalucía.

Desde este sindicato educativo señalan que de lo que se trata es de aprovechar la potenciali­dad de los docentes jubilados pero «nunca desde la imposición». «Por ejemplo, se le puede invitar a que de una charla, una ponencia, a que cree un grupo de trabajo con el claustro... en aquellas cuestiones que no interfiera­n con la docencia y podamos aprovechar su experienci­a y bagaje profesiona­l serán más que bienvenido­s», destaca Padilla. Desde este sindicato, no obstante, advierten a la Consejería de Educación que este profesor emérito en ningún caso viene a suplir el aumento de las plantillas que están reivindica­ndo. Hay que recordar, insiste Padilla, que este profesorad­o «no está en activo, es solo un complement­o extra para aquellas funciones que se determinen en el decreto y que todavía no están cerradas».

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