Arranca la feria Estampa
Estampa, la primera feria de arte de la pandemia que se celebra en España, abrió ayer sus puertas en Madrid convertida en un banco de pruebas de cómo se celebra una cita de este tipo: pasillos más amplios, renovación de aire cada veinte minutos y 3.548 personas de aforo máximo. “El nivel de ilusión y de exigencia es muy alto”, declaró el director de la feria, Chema de Francisco, que la inauguró junto al ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez-Uribes. Estampa, que tradicionalmente se celebra en otoño pero ha ido posponiendo su celebración por la pandemia, abre sus puertas rodeada de expectación hasta el próximo domingo. Hace un año que en España no se ha celebrado ninguna feria de arte. La última fue ARCO, apenas una semana antes del confinamiento y, según un informe del CSIC, fue uno de los muchos focos de entrada del virus en España –junto con los partidos de fútbol y otros eventos–. Estampa cuenta con el mismo número de galerías (70) que en su edición anterior, pero con mucho más espacio y medidas de seguridad para combatir la crisis sanitaria. “Hemos comprobado que la cultura es segura y se puede ir a los museos, los teatros o los conciertos. Debemos hacerlo y podemos hacerlo, porque la cultura es necesaria”, dijo en la inauguración Rodríguez-Uribes, que tiene la esperanza de que ARCO, que se ha pospuesto a julio, pueda celebrarse.