El pellizco difícil al corazón
Los ‘spots’ de la Navidad de la pandemia pasan un tanto de largo en los intermedios Las firmas más esperadas no han terminado de conectar
F. A. Gallardo
La firma que ha conseguido más notoriedad sin programar su anuncio para esta Navidad ha sido la de turrones El Almendro, que no cantará “vuelve a casa, vuelve” para no promover los movimientos en estas Navidades de restricciones. Les ha salido un mensaje bien sutil. Pero la mayoría de los anunciantes no han llegado con fuerza este diciembre al corazón del espectador (no siempre consumidor, también ciudadano implicado, en el caso de la lucida campaña de Acción contra el Hambre). La originalidad se encasquilla porque es complicado salirse del mensaje típico y en otras porque con la actual crisis, y con las pieles finas por doquier, es más difícil arriesgar. Campofrío, l a más esperada, ha tenido que vérselas con la aparición en su spot del pianista James Rhodes, lo que ha causado más de una polémica en las redes.
La firma de embutidos impactó en 2011 con el spot de Cómicos y desde entonces se hizo un hueco de atención en los intermedios navideños, pero la agencia McCann no ha atinado con DEV (Disfrute En Vida) con Quique San Francisco como La Parca y la voz (imitada) en off de Michael Robinson. Dos directores como
Paco Plaza y Daniel Sánchez Arévalo encabezaron el corto. Éste último ha creado uno de los nuevos spots más conmovedores, el de las historias familiares cruzadas de Suchard, a cargo de la agencia Ogilvy, pero es para verlo completo en youtube. La ONCE, con TBWA, ha conseguido un sentimental mensaje adaptando la letra del Bonito de Pau Donés. Una idea similar, con la letra de Un año más de Mecano, Pescanova acaricia la memoria colectiva a través de un pescador en O Grove. En 2018 tuvo el spot navideño más afortunado con el bigote de Del Bosque, que vuelve a aparecer junto a Jordi Hurtado.
La solidaridad y la sensibilidad por la calidad de vida en todos los hogares muestra la historia de una niña que idea una maquinaria para que lleguen los regalos a su barrio, también propuesta de McCann.
La Lotería de Navidad ha insistido en el mensaje de compartir décimos lo que limita sus historias aunque no le falten medios.
Hermanos y Vecinos han sido sus dos historias de reconciliación, a cargo de la veterana agencia Contrapunto BBDO, sin impactar con tanta eficacia.
El Corte Inglés ha optado por reiterar la canción de los elfos, llevándola a un cuento infantil con apariencia de musical, a cargo de Sra. Rushmore. En este ámbito Juguettos tiene una historia familiar conseguida en la que los niños piden regalos para sus atareados padres: “Jugar es ver la vida con los ojos de un niño”, es el lema ideado por BTOB.
La agencia Lola Mulewlove ha creado el anuncio de Tous, por la normalidad, junto al mencionado de Pescanova y el de Toys r’us, que pide a Papá Noel que se quede en su casa. Santa Claus, por supuesto, es el eje de la historia de Coca Cola, spot británico de Kennedy London.
Más contundente y sincero es el “que le den a 2020” de la cena de sidra El Gaitero, de la agencia Rosebud; y DDB usa con gran acierto y tierna ironía el bolero Acércate más para la Fundación Affinity. Freixenet renunció a sus burbujas de Broadway. Sin querer hacer ruido entre recelosos ha creado un animado y elegante spot orientado a los jóvenes con el lema “La vida es como la celebras”. Un año difícil para que calen los tópicos.