El nuevo dogma, americano y patriota
La base jugable es la de Far Cry 3 y Far Cry 4, pero Ubisoft Montreal ha aprovechado la ambientación en la América profunda para sacarse de la sotana nuevos mandamientos que amplían la fórmula y hacen que se sienta más salvaje que nunca.
El mundo ofrece más libertad que antes: está abierto en su totalidad desde el principio, las misiones se pueden acometer en cualquier orden y su perfil no se revela escalando torres de radio, sino con mapas, explorando y hablando con otros personajes.
Los escondites de preparacionista son refugios en los que obtenemos dinero y revistas de talento. Suelen ser fáciles de encontrar, pero dejan algunos de los mejores momentos, en forma de puzles, mecánicas plataformeras y ciertas sorpresas.
El arsenal es muy variado. no faltan las típicas armas de fuego (pistolas, lanzacohetes, fusiles, escopetas, ametralladoras, cócteles molotov, etc.), pero la mayor novedad son las herramientas para el cuerpo a cuerpo, como palas, bates, tuberías... Podemos reclutar a otros miembros menores de la resistencia para que nos acompañen, pero también a nueve especialistas con habilidades muy dispares: un aviador, una francotiradora, un experto en rpg... ¡Hay hasta un oso, un puma y un perro!
Los vehículos permiten circular por tierra, mar y aire. Los helicópteros y las avionetas de combate son los fichajes más provechosos, pero también hay "monstruos", como camiones o tractores, y en el modo cooperativo se puede ir como copiloto disparando.
La pesca no falta ya en casi ningún juego de hoy en día, y Farcry5 no iba a ser la excepción. Además, la ambientación ha traído consigo muchos animales nuevos para la caza mayor: bisontes, antílopes, wapitíes, lobos, pumas, alces, mofetas, toros...