Clínica veterinaria solidaria
Hace ya tiempo, un par de voluntarias dedicadas a la protección animal decidimos llevar a cabo un proyecto sin ánimo de lucro e inédito en Aragón: la creación de una clínica solidaria para realizar campañas de esterilización masivas, a precio de coste y continuadas en el tiempo, con el objetivo de dar solución a la proliferación de gatos en nuestra ciudad (tarea que es competencia exclusiva de los ayuntamientos pero que no son capaces de atajar) y, al mismo tiempo, aliviar la carga económica de las decenas de protectoras y particulares que dedican todo su esfuerzo y recursos económicos a paliar la situación. Invertimos muchas horas en la elaboración de este proyecto (estudio de iniciativas similares, cumplimiento de trámites burocráticos, reuniones, compra de equipos, alquiler y acondicionamiento del local, etc.). Pero nos encontramos con una inesperada situación: nos resultó casi imposible encontrar veterinarios solidarios que desearan colaborar. Llegamos a contemplar la posibilidad de la contratación de un profesional, pero ello hubiera repercutido en el aumento del coste de las esterilizaciones. Y esta circunstancia nos alejaría del objetivo inicial: intervenir el mayor número posible de gatos. La respuesta de los profesionales veterinarios ha sido completamente decepcionante y ante esta situación no nos ha quedado más remedio que abandonar el proyecto. Nos entristece profundamente ver que una iniciativa de estas características se vea paralizada, por una parte, por profesionales a los que se les presupone un alto componente de empatía y compasión y, por otra, por la indolencia e ineficacia de los ayuntamientos. Dicho lo anterior, y en honor a la justicia, nos gustaría dar las gracias a todas las personas que sí nos han ofrecido su ayuda en este esforzado camino. Zaragoza ha perdido la oportunidad de contar con un centro de esterilizaciones solidario. Y una vez más los principales damnificados son los animales.
Beatriz Casorrán Torres
ZARAGOZA