El Casademont-Manisa, un mero trámite en Europa

ZARAGOZA. El Casademont Zaragoza se enfrenta esta tarde (20.00) en el pabellón Príncipe Felipe al Manisa BBSK, en un partido intrascendente para el futuro de la FIBA Europe Cup, dado que los aragoneses ya han conseguido el pase a cuartos de final como segundos clasificados.

El entrenador Porfirio Fisac reconoció ayer que no arriesgará en exceso con algunos jugadores esenciales y dejó entrever que los reservará para el partido del próximo sábado, contra Lenovo Tenerife y otra vez en el Príncipe Felipe. Aunque ayer no se entrenó con normalidad por molestias en un tobillo, el escolta Thad McFadden sí será de la partida en el encuentro de esta tarde contra un equipo turco, que tampoco se juega nada al estar ya eliminado de la competición.

«Todos tienen que entender que es un partido para seguir creciendo: jugamos delante de nuestra afición, se repartirán más minutos, y es un reto para algunos jugadores. Hay gente que me tiene que seguir diciendo que quieren más minutos», dijo ayer Fisac, al tiempo que auguraba que hoy habría menos minutos para los titulares y «más oportunidades para la gente joven».

El Manisa, a quien en su cancha se ganó con algo de fortuna (6568, con cuatro últimos tiros errados por los turcos), tiene en el alero mexicano Pako Cruz uno de sus mejores exponentes, si bien el alapívot Emanuel Terry también acostumbra a encontrar con facilidad el aro.

Cuando se supere el trámite de esta tarde, el cruce europeo parece claro: salvo carambolas que

intentado atraer a un jugador que era muy buena opción, que está jugando en Australia, pero al final no hemos conseguido sacarlo», explicó el entrenador. «El club sigue trabajando, pero en el mercado libre sin contrato ahora mismo sólo hay americanos y el resto no es algo mejor de lo que ya tenemos. La única idea es que venga alguien que esté jugando

y tenga alguna opción de salir de un club», comentó Fisac, que se muestra confiado en que su plantilla siga sumando jugadores a la causa contra Breogán hicieron Didac, Mencía o Kravic. Fisac no se pronunció sobre las dudas que Simanic parece sembrar sobre su regreso a Zaragoza, donde tiene un año más de contrato. «Es serbio», se limitó a decir. obligarían a ganar al Casademont hoy de más de 30, los rojillos se enfrentarán con el actual líder de la liga alemana, el Niners Chemnitz, con el factor pista en contra. «Me da igual jugar fuera que en casa. Son dos partidos y hay que ganar los dos. Esta liga está hecha así y qué más da jugar el primero en casa que el segundo», reflexionó el segoviano, que sí consideraría importante el factor cancha en una eliminatoria al mejor de tres, pero no en un duelo a ida y vuelta.

Fisac se ha referido también al partido del sábado, más decisivo que el de hoy, porque permitiría poner tierra de por medio con los equipos que están luchando en la zona baja. «Te juegas lo que quieres ser de cara al futuro y hay que acabar de sentenciar esa parte de abajo. Parece que hay una distancia, pero en esta liga nunca puedes estar cómodo». El técnico ha añadido que «jugar un segundo partido consecutivo en casa es una oportunidad de reafirmarte» con el reto de mirar hacia arriba.

Contra el Breogán, el pasado sábado, su aportación resultó capital para la victoria del Casademont Zaragoza (63-61).

Fue un partido que disfruté muchísimo en el tema personal. Hasta ahora ha sido mi mejor actuación en la Liga Endesa, y me sentí muy cómodo de principio a fin. Ya empecé con muy buenas sensaciones, con mucha energía, y eso me dio confianza. En lo colectivo sufrimos, y fue un duelo apretado en los últimos minutos por nuestras pérdidas de balón. Todo se decidió en la última bola y, afortunadamente, obtuvimos la victoria con ese lanzamiento de Santi (Yusta). Así que, gracias al triunfo, fue una noche perfecta.

Usted apareció en los momentos más comprometidos del choque. Incluso representó una amenaza desde el perímetro, con tres triples anotados.

Salí a la pista con mucha confianza en mí mismo. Cuando tiré el primer triple y entró, todo cambió: tuve más seguridad y me animó a seguir intentándolo. Después pude lanzar dos tiros más, totalmente solo, y también entró la pelota. Lo importante, en cualquier caso, fue haber logrado la victoria.

Facturó 14 puntos y 5 rebotes en 22 minutos de juego. Pero más allá de las estadísticas, usted se distingue por su elevada intensidad.

La energía, el esfuerzo y la intensidad son innegociables en mi juego. Siempre ha sido así. Desde que salí de Cuba para marcharme a Argentina, siempre he tratado de que nadie me supere en ganas, en energía, en trabajo. Un partido malo lo tiene cualquiera, pero la energía y las ganas no son negociables para mí, así que siempre salgo a dar el máximo en cada partido.

Por su condición de extracomunitario, usted fue contratado con la idea inicial de salir cedido a otro club. Sin embargo, su juego enérgico y combativo enseguida convenció al técnico, Porfirio Fisac, y se quedó en la plantilla.

La idea era salir cedido, sí. Cuando me lo plantearon, todos estábamos de acuerdo en ello, porque mi intención es disponer de minutos, aprender y progresar, y sabía que era una opción que podía resultar beneficiosa. Luego surgió la oportunidad de permancer en el equipo, y posteriormente se dio la lesión de Mark Smith, por lo que tuve más posibilidad de disponer de más minutos.

Con el regreso de Mark Smith, usted puede ver reducido su protagonismo en la pista. Además, el club persigue la incorporación de otro ala-pívot.

Ahora mismo no pienso en eso, sino que estoy disfrutando todo lo que puedo del momento actual. Después ya veremos cómo se van dando las cosas, pero ahora toca disfrutar de lo que me está pasando, disfrutar del hecho de jugar en la Liga ACB, que es el sueño de muchos, y disfrutar también de que vengo de realizar mi mejor partido con el Casademont Zaragoza.