El alza del dólar impulsa el negocio del Ibex en 8.000 millones de euros
EFECTO DIVISA/ Iberdrola, Ferrovial, ACS, Grifols, Santander y Fluidra disparan sus ingresos en 2022 por la actividad en Estados Unidos. La pujanza del real brasileño y el peso mexicano también juega a favor.
La apuesta de las empresas españolas por Estados Unidos durante la última década va a tener una importante recompensa extraordinaria este año, gracias a la evolución de los tipos de cambio y la fuerte apreciación del dólar frente al euro.
Según estimaciones de analistas, un 14% de las ventas de los grandes grupos del Ibex –situadas el año pasado en 477.778 millones de euros– procede de Norteamérica. En 2022, si no cambia la tendencia en los últimos meses, la apreciación de casi el 15% del dólar estadounidense frente a la moneda común europea (y la subida experimentada también por el dólar canadiense) va a engordar en unos 8.000 millones de euros la cifra de ingresos de las cotizadas españolas.
Entre las firmas más beneficiadas figuran Iberdrola, Santander, ACS, Ferrovial, Grifols y Fluidra, al tener una porción significativa de sus activos en Estados Unidos.
El mercado de divisas ha dado otras alegrías este año a las multinacionales españolas, sobre todo por la escalada del real brasileño. Nuevamente, Santander e Iberdrola salen ganadores por esta evolución, así como Telefónica.
Por otro lado, la revalorización del peso mexicano ha favorecido a Santander y BBVA, aunque este banco se está viendo perjudicado por el desplome de la lira turca. Por fortuna para el Ibex, apenas tiene presencia en Japón, donde el yen vive mínimos históricos.
Efecto en dividendos
El incremento de ingresos en Estados Unidos, Brasil y México se traslada solo en parte a los resultados finales de las empresas y a los dividendos para los accionistas, ya que la apreciación de divisas extranjeras también engorda partidas como los gastos operativos en las filiales extranjeras y –cuando hay deuda denominada en esas monedas– los intereses financieros. En el caso de la deuda, los grupos suelen cubrir con derivados tanto el riesgo de fluctuaciones de tipos de cambio como de tipos de interés. Ferrovial, por ejemplo, tiene coberturas por 1.927 millones de dólares estadounidenses, 4.377 millones de dólares canadienses y 233 millones de libras. “La estrategia es garantizar el valor de los activos”, dice el grupo constructor.
La petrolera Repsol, que opera en un sector donde el dólar es la divisa clave para comprar y vender crudo, limita al máximo su exposición a cualquier variación. De hecho, una apreciación del 5% del dólar frente al euro solo resta 1 millón a su beneficio neto.
Pero en general, la apreciación de las divisas americanas tiene un impacto final positivo para los grandes del Ibex con negocios en Estados Unidos, Brasil y México.
De hecho, esta tendencia ya tuvo su reflejo en las cuentas del primer semestre del ejercicio. Iberdrola, por ejemplo, señala que la evolución de sus divisas de referencia elevó el beneficio bruto operativo (ebitda) de la eléctrica en 381 millones de euros (un 6% del total) y elevó el beneficio neto en 60 millones.
Para Telefónica, el tipo de cambio ha contribuido, debi
La evolución de la divisa americana también eleva la deuda en dólares de las multinacionales
Los analistas creen que la Bolsa no está recogiendo las mayores ganancias exteriores del Ibex
do principalmente a la apreciación del real brasileño frente al euro, al propulsar los ingresos en 526 millones, el beneficio operativo en 187 millones y el cash flow en 127 millones. Santander detalla que los movimientos de las monedas han mejorado sus ingresos un 7%, mientras que los gastos sólo han crecido un 5% por ese factor. El patrimonio de Acciona aumentó en 226 millones entre enero y junio gracias a la apreciación de los dólares estadounidenses, canadienses y australianos.
ACS mejoró su ebitda en 39 millones de euros por el efecto divisa, mientras que el de Grifols vivió un salto de 21 millones.
El grupo Ferrovial incrementó sus ingresos 4 puntos porcentuales más de lo generado a cambio constante en el primer semestre, y Fluidra lo hizo en 5 puntos.
Las empresas, conscientes de que el mercado es volátil y puede darse la vuelta en algún momento, suelen ofrecer a los inversores sus cuentas de resultados eliminando el impacto de los tipos de cambio.
Sin reacción en Bolsa
Teóricamente, el aumento de las ganancias que llegan del exterior debería aislar en parte a las empresas españolas y europeas cotizadas en Bolsa de la crisis en el continente por la guerra de Ucrania, limitando su castigo bursátil. Un 44% de las ventas del Ibex son obtenidas en otras regiones, porcentaje que sube al 60% en los componentes del EuroStoxx 600.
Sin embargo, el mercado no está aplicando esta teoría en los últimos meses, y casi nadie se libra de las ventas de acciones por parte de los inversores.
Según Sharon Bell, analista de Goldman Sachs, “cuando las divisas europeas se debilitan, como ha sucedido este año, la mejora de competitividad o el positivo efecto de traslación de las ganancias internacionales no son suficientes para compensar las razones que explican el declive de la moneda. Estas razones suelen ser débil crecimiento y riesgos elevados, tanto soberanos como energéticos”.
La paridad del dólar con el euro recuperada este año tras una larga etapa de supremacía del euro puede ser una buena noticia para las empresas con operaciones en EEUU, en la medida en que aumenta sus ingresos, pero sobre todo lo es para aquellas cuyos ingresos son en dólares pero sus gastos en euros (destaca el caso de Repsol y en el mercado continuo el de Ence, extensible a todas las papeleras). En el primer capítulo figuran todas las grandes del Ibex que en las últimas décadas han crecido en EEUU, incluyendo a ACS, Ferrovial, Grifols, Iberdrola, Fluidra y Banco Santander, y otras que también están beneficiándose este año de la revalorización del real brasileño y del peso mexicano (por ejemplo, BBVA, Santander, Iberdrola y Telefónica). Para los grupos con presencia en aquellos mercados, la subida del dólar o de otras divisas supone mayores ingresos en euros, pero también mayores gastos operativos e importe nominal de deuda. Se benefician en todo caso de la revalorización del dólar en la parte del margen operativo y neto, lo que puede aumentar la rentabilidad global. Según estimaciones, el 14% de las ventas de los grandes grupos del Ibex procede de Norteamérica, por lo que la apreciación del 13% del dólar estadounidense y la muy parecida experimentada por el dólar canadiense aumentará en unos 8.000 millones de euros la cifra de ingresos de las cotizadas españolas, con una ampliación del diferencial entre las ventas reportadas y las ventas a tipo de cambio constante. En lo que se refiere a la deuda, la práctica de contratar coberturas de tipos de cambio limita las posibles pérdidas y beneficios de los movimientos de divisas, pero las coberturas son parciales. Las perspectivas en los próximos trimestres es de gradual debilitamiento relativo del euro respecto del dólar, lo que hará que el peso de los negocios en Estados Unidos siga aumentando en las grandes compañías citadas. El euro no está solo en esta caída, dado que la libra esterlina está en su punto más bajo respecto del dólar en 37 años.
Especulación, un problema en el gas
El presidente ruso Vladímir Putin está usando el gas como arma económica. Rusia es el primer proveedor de gas a la UE, y Putin lo sabe. Abriendo y cerrando los gasoductos que unen Rusia y Europa, Putin ha conseguido romper todas las reglas económicas del mercado energético. No sólo ha quebrado el mercado del gas. También ha conseguido poner patas arriba el mercado eléctrico, porque muchas centrales de producción de luz se nutren de gas para su funcionamiento. Pero la guerra económica del gas en realidad tiene dos componentes. Uno logístico y otro financiero. El logístico es un problema relativamente fácil de resolver. Puede llevar tiempo sustituir los envíos por tubería de gas ruso por otros de otros países usando otras vías, por ejemplo, metaneros, o gasoductos alternativos. Pero al final se conseguirá. Lo que resulta más difícil es evitar el problema de la especulación financiera si no hay voluntad de hacerlo. La subida o bajada de precios en una economía es un juego de suma cero. Donde uno pierde, otro gana. Además de Putin, que ahora está consiguiendo vender cada molécula de gas a mayor precio, también hay otros beneficiarios de la escalada: los traders o importadores de gas que comercializan contratos, en ocasiones, revendidos varias veces al mejor postor. Todas las crisis energéticas siempre han supuesto una revisión de los índices de las materias primas (Brent, Henry Hub y otros). Ahora toca la revisión del TTF holandés y sus equivalentes.
Alantra desafía la incertidumbre
La división de capital riesgo de la gestora española Alantra forma parte de las firmas capaces de seguir captando recursos para invertir en un momento de especial incertidumbre. La inflación, el alza de los tipos de interés y las tensiones geoestratégicas conforman un cóctel peligroso que amenaza con recesiones inminentes en las economías occidentales. El vehículo de su participada francesa ACP ha levantado 306 millones de euros para invertir en empresas en Europa, con especial interés en España. El objetivo es abordar unas 16 transacciones en dos años en empresas de tamaño medio y, para ello, ha recurrido a los recursos de inversores históricos, lo que demuestra la capacidad de la firma para fidelizar a sus clientes y generar confianza. Lo cierto es que, a pesar de los nubarrones económicos, Alantra sigue detectando oportunidades en el mercado y perfiles de empresas que operan al margen del ciclo económico y que pueden convertirse en una buena apuesta. Los racionales de las operaciones han cambiado ahora y las principales dificultades empiezan a detectarse en el acceso a la financiación y el previsible descenso de una liquidez que en los últimos años había resultado inusual y que a menudo disparaba los múltiplos de valoración de las empresas. El capital riesgo y los fondos de inversión tradicionales tienen detectados en Europa negocios de especial interés, entre ellos los relacionados con las infraestructuras y las tecnologías.