Altamar ficha en McKinsey, Credit Suisse y Greenhill
La división de asesoramiento de AltamarCAM ha sido inmune a la crisis del sector de los últimos dos años y la aprovecha para reforzarse.
Claudio Aguirre y Emilio Saracho forman parte del grupo sénior de apoyo en la entidad
Altamar Advisory Partners ha vivido al margen de la tormenta que ha azotado la banca de inversión mundial en 2022 y 2023. La entidad ha mantenido sus ingresos y ha seguido haciendo operaciones para conectar el capital riesgo y la empresa familiar, según sus responsables.
No es el único capítulo en el que ha ido a contracorriente. Al igual que grandes entidades como Santander o Deutsche Bank, Altamar ha decidido aprovechar las turbulencias para reforzarse con fichajes cuando otros plegaban velas por la caída de la actividad.
La entidad se suma a la lista de bancos de inversión que han encontrado en Credit Suisse una cantera para su talento. De ahí procede Juan Sebastián Montijano-Carbonell, con 10 años de experiencia en el banco suizo y experto en consumo. Los analistas Aitana López de Argumedo y Antton Ranedo, con trayectorias en All-Iron Ventures, McKinsey y AFI Global Investments, se suman a los refuerzos de la plantilla.
La incorporación más reciente es la de Ignacio Pemán, procedente de la boutique estadounidense Greenhill, que acaba de ser comprada por el banco japonés Mizuho. Al puesto aspiraron más de 300 candidatos, según fuentes conocedoras del proceso.
Los cuatro fichajes elevan a ocho el número de banqueros de Altamar Advisory Partners, la firma creada en 2015 por exbanqueros de Bank of
America Merrill Lynch para servir de conexión entre las empresas familiares y el capital riesgo y que forma parte de AltamarCAM.
José Epalza y Jaime Fernández-Pita lideran el equipo, que sigue la filosofía de reforzarse desde abajo.
La intención de Altamar no es hacer decenas de operaciones al año, sino convertirse en aliado estratégico de sus clientes y ofrecerles una asesoría personalizada y con la implicación de los socios en todo momento.
La firma también tiene estándares propios para los clientes, que son principalmente empresas familiares, a las que ayuda en su desarrollo. Y lo hace en muchas ocasiones con la entrada en su accionariado de fondos de capital riesgo, con lo que aprovecha el conocimiento que les da el grupo al que pertenecen, AltamarCAM, especializado en la inversión en activos alternativos, sobre todo en el private equity internacional.
Es el enfoque que se ha dado en la asesoría a la familia
Uriach para la incorporación de ICG como socio, al igual que a Fremman Capital y Natural Fruit en la compra de Bollo o a Corpfin y a los fundadores de Kids&Us en la entrada de Charterhouse Capital Partners en el capital.
Para ello cuentan con la otra pata de apoyo, la que proporciona el grupo de veteranos de la banca de inversión que forman parte de AltamarCAM.
Claudio Aguirre, fundador de Altamar, es uno de ellos, junto a Emilio Saracho, exJPMorgan, y Ramón Peláez, uno de los fundadores de Altamar Advisory Partners junto a José Epalza.