Crean en el cementerio un memorial histórico
El monumento con las lápidas antiguas marca un eje cronológico
Detalle de una de las lápidas recuperadas que instalarán en la ampliación del cementerio de Betxí.
Con la ampliación del nuevo cementerio que está llevando a cabo el Ayuntamiento de Betxí se está convirtiendo poco a poco en un punto de referencia de la memoria histórica del último siglo de la población. Tras conocer recientemente que la entrada principal al recinto se hará a través de una réplica de la puerta modernista que había en el PalauCastell, ahora el consistorio ha hecho pública la instalación en una de las paredes perimetrales de un memorial construido con la recuperación de algunas de las lápidas más antiguas que tenían guardadas.
La idea se gestó hace ahora cuatro años, cuando derribaron los nichos más antiguos del camposanto primigenio, que contenía mármoles de las primeras décadas del siglo pasado. En ese momento, en previsión de su puesta en valor con la construcción de la nueva parcela, las reservaron en un espacio adecuado para poder sacarlas en el momento conveniente. Y ahora es cuando las han recuperado y ordenado cronológicamente, estableciendo un paralelismo entre el inicio de la construcción del camposanto (a finales del XIX) y la ampliación.
El recorrido histórico se inicia con el recuerdo a Elvireta Franch Piquer, fallecida en 1899, el mismo año de la inauguración del popular tren la Panderola. De esta forma, a lo largo de varios estadios se llega a 1933, fecha de la última de las losas recuperadas y año en que por primera vez se estableció el sufragio femenino en España.
El alcalde, Alfred Remolar, se muestra muy satisfecho de la iniciativa: «Desde hace mucho tiempo intentamos recordar la historia de los lugares y edificios en los que actuamos, para recuperar la memoria de tiempos pasados y rememorar los orígenes de la gente que nos precedió».
En los próximos días concluirá la construcción de la nueva parcela del camposanto, con alrededor de 2.000 m² y con capacidad para más de 500 nichos. El proyecto tiene un presupuesto de 100.000 euros y ha sido sufragado a través del plan 135.