Un perdón que no nos creemos

Desde hace muchos años la mayoría de ciudadanos hemos tenido evidencias suficientes de que el Partido Popular de la Comunitat Valenciana se estaba financiado ilegalmente a costa de los valencianos.

Todos menos aquellos dirigentes que preferían no saber, mirar hacia otro lado y, evidentemente, negar una y otra vez los hechos y defender que todo era una trama contra el PP, llegando incluso a criticar los autos de los diferentes jueces que iban impulsando la investigación de los casos de corrupción. Los mismos que acosaban mediática y personalmente a otros políticos que decidían denunciarles en los juzgados.

Y SÍ, LOS MISMOS

cuya forma de colaborar con la justicia es destruir ordenadores que incluyen información valiosa sobre una posible caja b y financiación irregular. E incluso los hechos sucedidos en el tiempo nos dan a pensar sin error a equivocarnos que han dilatado el proceso todo lo que han podido hasta la prescripción de los delitos para que algunos ex dirigentes populares evitasen entrar en prisión.

Después de escuchar las declaraciones de empresarios de peso y exdirigentes del PPCV como Costa en la Audiencia Nacional, ya no existe margen de error y se ha confirmado aquello que ya sabíamos: el PP --siempre presuntamente porque todavía no hay sentencia-- ha saqueado durante dos décadas las instituciones valencianas, pagando con nuestros impuestos actos de campañas electorales al menos del 2007 y 2008. Y ante las evidencias sale la señora Isabel Bonig a decirnos que el PP ya ha pedido perdón. Un perdón que a la vista de los hechos no nos creemos. Lo que tienen que hacer es devolver a los valencianos hasta el último céntimo de lo robado y colaborar con la justicia de verdad para esclarecer todos los hechos.