Le Pen se queda sin ninguna vicepresidencia en la Asamblea Nacional
El bloque macronista, la derecha tradicional y la alianza de izquierdas Nuevo Frente Popular han vuelto a aplicar el cordón sanitario para evitar que la extrema derecha de Reagrupación Nacional (RN) obtuviera alguna de las seis vicepresidencias de la Asamblea Nacional a pesar de haber sido el partido más votado en las pasadas elecciones, una medida que ha disgustado profundamente a la formación de Marine Le Pen. El pacto entre los macronistas y la derecha conservadora de Los Republicanos (LR, con 45 diputados), aseguró en la noche del viernes que esos dos grupos consiguieran cada uno dos vicepresidencias, mientras que las dos restantes fueron para la izquierda.
«Este acuerdo ha sido visto por todo el mundo», clamó Le Pen, quien acusó a los republicarnos de haberse «vendido» al bloque macronista. Le Pen también denunció que el LR logró más de casi 11 millones de votos en las elecciones de junio y julio, por 1,5 millones de los conservadores. Eso significa que el LR ha logrado la representación en la mesa de la Asamblea que «legítimamente le correspondía al RN», insistió. «Es un escándalo democrático», afirmó el RN en un mensaje en X, en el que recordó que, sin alianzas, constituye el primer grupo parlamentario de la nueva Asamblea Nacional. El RN se quedó también sin ninguna de las doce secretarías, de las que nueve fueron para la izquierda, agrupada en el Nuevo Frente Popular.
La extrema derecha no ha sido el único grupo en mostrar su malestar por la votación. Varios diputados denunciaron manipulación de papeletas y fraude. Tras la larga votación de las vicepresidencias, se descubrió que las urnas contenían 10 sobres más que el número de electores posibles, por lo que la presidenta de la Asamblea, la macronista Yaël Braun-Pivet, ordenó la repetición de la votación y los diputados exigieron una investigación.
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