El PSOE veta en el Congreso a Guerra y otros antiguos dirigentes
Ciudadanos deja como protesta la comisión de reforma constitucional
Albert Rivera anunció ayer que Ciudadanos abandonará la comisión impulsada por el PSOE en el Congreso para reformar el Estado de las autonomías después de que este partido vetara la petición de Ciudadanos para que intervinieran en ella cuatro exdirigentes del PSOE: Alfonso Guerra, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, José Bono y Juan José Laborda. En la comisión ha habido ya 29 comparecencias.
El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, anunció ayer que su partido abandona la comisión territorial impulsada por el PSOE en el Congreso para la evaluación del Estado de las autonomías. “No vamos a seguir en la comisión Sánchez o comisión de la nación de naciones”, afirmó después de reprochar a los socialistas que “vetaran” su petición para que comparecieran cuatro exdirigentes socialistas, entre ellos el exvicepresidente Alfonso Guerra. El PP y el PSOE no han dado luz verde hasta ahora a estas cuatro comparecencias.
En una reunión con los diputados de su grupo parlamentario, Rivera justificó su salida en que los socialistas se niegan a llamar a Alfonso Guerra, exvicepresidente del Gobierno; Juan Carlos Rodríguez Ibarra y José Bono, exjefes de los Ejecutivos autónomos de Extremadura y Castilla-La Mancha, respectivamente; y Juan José Laborda, expresidente del Senado. “Si el PSOE quiere reformar la Constitución, estaremos los primeros: sin vetos y con el apoyo de profesionales. Pero, para construir un relato partidista y de crisis interna de su partido, que no cuenten con nosotros”, afirmó ayer Rivera sobre la comisión constituida el 15 de noviembre del pasado año y que arrancó con la ronda de comparecencias hace poco más de dos meses.
En la Mesa de este órgano, el PSOE y el PP han rechazado hasta ahora llamar a estos cuatro exdirigentes, aunque no de forma definitiva, ya que los comparecientes se fijan por ternas para las próximas sesiones. Esto es, cabía la posibilidad de llamarlos más adelante, aunque la dirección socialista es reacia a hacerlo con el argumento de que no hay tiempo para tantos exdirigentes. La suma de las listas propuestas por todos los partidos asciende a más de 200 personas. La comisión empezó sus sesiones con los ponentes de la Constitución y terminará con los presidentes autonómicos en ejercicio, los expresidentes del Gobierno y el actual jefe del Ejecutivo. Ya han pasado 29 personas por ella.
Ciudadanos ha decidido abandonar la comisión constituida hace cuatro meses por la negativa a la comparecencia de esos cuatro exdirigentes del PSOE —varios de ellos, críticos con la idea de plurinacionalidad que defendió Pedro Sánchez en las primarias—. La formación liderada por Rivera propuso un listado con medio centenar de comparecientes. Este incluía, por ejemplo, a los tres ponentes vivos de la Constitución, y a Francisco Sosa Wagner, que formó parte de la comisión de expertos creada en el seno de Ciudadanos para reformar la Ley Fundamental. Los cuatro ya han acudido al órgano del Congreso en las últimas semanas. Al mismo tiempo, Ciudadanos solicitó la comparecencia de todos los expresidentes del Gobierno, excepto de José Luis Rodríguez Zapatero. “El sectarismo no es el camino para reformar la Constitución. [Sánchez] ya no escucha ni a los suyos”, reprochó ayer Rivera al líder del PSOE. Ciudadanos tardó en sumarse a esta comisión de estudio y evaluación del Estado autonómico impulsada por el PSOE tras la crisis en Cataluña con objeto de servir de preludio a una comisión de reforma constitucional.
El órgano, que preside el socialista José Enrique Serrano, tiene por objeto arrojar unas conclusiones que puedan servir de base para abordar el estudio de una posible reforma del Título VIII de la Constitución.
El partido de Rivera se opuso a la creación de la comisión pero finalmente anunció su participación a finales de septiembre. Con muchas reticencias, el diputado de centroderecha dijo que su partido participaría finalmente en el órgano que calificó a la vez de “caballo de Troya de los independentistas”.
“Oportunismo”
El PSOE y el PP cargaron ayer contra el “oportunismo” de Rivera por abandonar la comisión solo cuatro meses después de su puesta en marcha en función de un supuesto veto de cuatro comparecientes. “Rivera siempre se mueve por protagonismo y por tener presencia y fotos. Y, en este caso, se ha dado cuenta de que la comisión hace un trabajo serio, riguroso y jurídico. Y, con esos parámetros de seriedad y rigor, Ciudadanos no se suele mover bien”, criticó Margarita Robles, portavoz del PSOE en el Congreso, que afirmó también que “no es creíble hablar de vetos con una panoplia tan variada” de comparecientes.
En la misma línea, el portavoz del PP, Rafael Hernando, rechazó la existencia de ningún veto y criticó los bandazos de Rivera. “Cada día cambian de opinión”, cargó el portavoz, antes de acusar también a Rivera de “infantilismo” y “veleta”.
Con la salida de Ciudadanos, la comisión territorial se verá todavía más mermada. Este órgano solo contará con los socialistas, populares y algunos diputados del Grupo Mixto. Unidos Podemos y los nacionalistas —PNV, ERC y PDeCAT— no participan en ella desde que se constituyó.