“El compromiso pudre el pensamiento”
Guillermo Molina Morales
Guillermo Molina Morales (38 años) ganó el IV Premio Internacional de Poesía Margarita Hierro con su último libro, Mar caníbal, dedicado a la historia y a la sociedad del Caribe. Además, ha ganado los premios Claudio Rodríguez (2013) y Antonio Carvajal (2008). Es profesor e investigador en la Universidad Central de Colombia y en el Instituto Caro y Cuervo, especializado en literatura, filología y lingüística.
¿Qué le hizo querer ser escritor? La (ingenua) necesidad de entender el mundo.
¿Qué le debe su poesía a los distintos lugares donde ha vivido? El cruce de fronteras y la cédula de extranjería.
¿Cómo cree que puede enseñarse la literatura? La literatura no puede enseñarse, y menos de la manera tradicional. Imagínese reducir la sexualidad a una enumeración de personas que follaron bien.
¿Qué echó de menos en su formación, cuando era estudiante? Sospechaba que aquel sistema de retículas no tenía mucho sentido. Ahora sé que no lo tiene. Podemos lograr una relación más fluida entre el descubrimiento personal, la conversación colectiva y lo que llamamos “vida”.
¿Qué gana la vida con la poesía? La posibilidad de intensificar la experiencia de estar en el mundo.
¿Y qué gana un poeta de la experiencia vital? Es el argumento de la obra. Un argumento bastante pobre, por cierto, cuando se limita al anecdotario individual.
¿Qué libro ajeno le habría gustado escribir? ¿Para qué escribir un libro ajeno si puedo leerlo? Busco escribir un libro porque todavía no existe.
¿Qué poeta no traducido en nuestro país recomendaría? Se me ocurren algunas poetas nacidas en Trinidad y Tobago: Marlene Nourbese Philip, Dionne Brand y Claire Harris. En las tres hay una tensión de alto voltaje entre el lenguaje y el mundo.
¿Con qué canción se siente identificado? Sin duda, con el género “soca” de Trinidad: traspasa las identificaciones.
¿Cuál es la película que más veces ha visto? Películas sencillas e interminables, como Patterson, Boyhood y La ciénaga.
¿Qué suceso histórico admira más? La abolición de la esclavitud en América, cuando todavía era económicamente rentable para los esclavistas.
¿Qué está socialmente sobrevalorado? El compromiso con cualquier causa buena: empantana el pensamiento y lo pudre. Ser militar o militante es exactamente lo contrario de ser crítico.
¿Qué importancia tienen los premios en una carrera literaria? Al escritor, le dan energía y dinero (es importante el dinero) para seguir en la brecha. Para el lector, los premios visibilizan obras que podrían valer la pena. No son una garantía, pero menos garantía es el aplauso solitario de tu abuela.