El Mundo Madrid

El alumno «llorón» de Samu Sánchez

El asturiano, que ayer ganó la etapa del ‘sterrato’ del Giro, se formó en la Academia creada en 2015 por el campeón olímpico en Pekín’ 2008

- PABLO DE LA CALLE

El asturiano que ha terminado con un lustro de sequía española en el Giro de Italia comparte apellido con su maestro. Pelayo Sánchez (Tellego, 2000), ganador de la etapa del sterrato de la Corsa Rosa, se formó en la MMR Academy que dirige Samuel Sánchez en Oviedo desde 2015. El campeón olímpico de Pekín 2008 moldeó a un corredor con gran talento pero bajo de confianza.

«Pelayo es un llorón, siempre está quejándose. Es muy dubitativo. No te puedes imaginar el montón de mensajes que me ha enviado desde que comenzó el Giro, diciéndome que no estaba bien. Yo le decía que estuviera tranquilo que se reservara para la etapa del sterrato, que se metiera en una fuga y que tirase para adelante. Me alegro que me hiciera caso», recalca Samuel instantes después del que su ex pupilo derrotara a Julian Alaphilipp­e y terminara con una nefasta racha de triunfos en la prueba italiana. El anterior ganador fue Pello Bilbao, en 2019.

Pelayo Sánchez permaneció en la MMR Academy cuatro años, desde cadete a júnior. Debutó como profesiona­l en 2021 con el Burgos-BH. «Es un quejica, pero también es un killer del área, sabe ganar y lee muy bien las carreras. Tiene instinto y se crece ante adversidad, como demostró con su pelea con Alaphilipp­e [el francés le abroncó por demarrar en un repecho] y Plapp. Es rápido y sube bien, es un caza etapas, muy parecido a Ion Izagirre, pero tiene que aprender a no ser tan negativo», añade Samuel Sánchez. Sus amigos recuerdan que una vez, cuando era juvenil, se negó a correr una contrarrel­oj en la Vuelta a Valladolid porque estaba desanimado. Se presentó a la etapa en ropa de calle y su director, el ex ciclista Benjamín Noval y técnico de MMR Academy, le obligó a cambiarse de ropa y a montar en la bicicleta. Tomó la salida y ganó. Y es que a pesar de sus 60 kilos también es un aceptable contrarrel­ojista.

El nuevo talento del equipo Movistar está estudiando Fisioterap­ia y vive con su padres y hermana en Tellego, un pequeño pueblo, a sólo 13 kilómetros de Oviedo. Todas las semanas, cuando no está con el Movistar, sale a entrenarse con Samu Sánchez por las carreteras asturianas. Pelayo siempre apuntó notables condicione­s, pero sus problemas con la alergia le frenaron la progresión. Todo mejoró cuando hace un par de años se operó de sinusitis. En su debut en la Vuelta a España, en 2021, con sólo 21 años, destacó en las etapas de montaña asturianas y gallegas, y especialme­nte en la dura jornada del Gamoniteir­u. En 2023 se estrenó como ganador de etapa en la última jornada de la Vuelta a Asturias, con final en la calle Uría de Oviedo. En la última Vuelta a España acaparó titulares tras quedar tercero en Guadarrama, sólo superado por Poels y Evenepoel. Esta temporada también sumó el Trofeo Pollença-Port d’Andratx.

Para este chaval de 24 años, el esprint de ayer será imborrable y nunca olvidará el consejo de su maestro: «Desde el inicio del Giro intenté ahorrar energía porque sabía que no estaba en forma para estar delante con los primeros días. Así que me reservé para esta etapa con la intención de meterme en una escapada, pero nunca me imaginé ganarla».

«Ha sido una locura, un sueño. Esto es increíble. Durante todo el día traté de estar tranquilo y eliminar a algunos corredores. Al final me quedé con Plapp y Alaphilipp­e, intenté dejarlos, pero me fue imposible», dice el nuevo dominador del sterrato en esas carreteras de tierra que tanto se parecen a las de su pueblo.

 ?? LUCCA BETTINI / AFP ??
LUCCA BETTINI / AFP

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain