Injustos ataques a la distribución
Economía asegura en el Plan de Estabilidad que el 95% del alza del IPC de los alimentos se debe a los costes importados
Durante los últimos meses el Gobierno, especialmente el ala de Podemos, ha atacado con fuerza al sector de la distribución por, presuntamente, beneficiarse de los altos precios de la alimentación para aumentar sus ganancias. “Aquí hay alguien que se está forrando”, llegó a decir la vicepresidenta Yolanda Díaz. Ione Belarra fue incluso más allá y acusó directamente al presidente de Mercadona, Juan Roig, “por hacerse de oro”. Una críticas con las que criminalizaban a los supermercados por engordar sus márgenes impulsando con ello el IPC de los alimentos. Algo que es rotundamente falso y que el propio Ministerio de Economía reconoce en el Plan de Estabilidad 2023-2026 enviado el 28 de abril a Bruselas. En el texto, el departamento liderado por Nadia Calviño asegura que “los costes importados explicaron casi el 95% del incremento de precios de las materias primas, incluyendo las alimentarias”. Es decir, el Ejecutivo asegura que la escasez de producción provocada por la sequía y la guerra de Ucrania, que disparó el precio de los cereales, argumenta la práctica totalidad del alza de los alimentos, que en abril se situó en el 16,5% interanual. Un análisis que concuerda plenamente con la realidad de un sector que trabaja con unos márgenes muy reducidos, del entorno del 3%, por la elevada competencia. Es más, el Banco de España destacó en una encuesta realizada en febrero a cerca de 14.500 sociedades del sector que la distribución ha sufrido un deterioro de sus márgenes que arrancó ya en el segundo trimestre del pasado año y que se ha agudizado en el arranque de 2023. Queda así demostrado que Podemos ha quedado en evidencia con unos ataques injustos y demagógicos a unas empresas que no tienen la culpa del alto IPC de los alimentos.