Bach y sus colores con Bernardini
ORCHESTRA BAROCCA ZEFIRO HHHHH
Programa: Conciertos de Brandenburgo BWV 1046-1051, de J. S. Bach. Director: Alfredo Bernardini. Lugar: Teatro de la Maestranza. Fecha: Sábado, 4 de mayo. Aforo: Lleno.
Tras tantos conciertos de la Sinfónica con el desangelado panorama de medio teatro vacío, da gusto ver el Maestranza lleno para disfrutar de un concierto barroco, sin duda el repertorio con más arraigo entre los aficionados sevillanos.
En esta ocasión se ponían en los atriles los Conciertos de Brandenburgo de Johann Sebastian Bach, una de esas colecciones que marcan una época y que dan cumplida cuenta del genio de su creador, que quiso con estas seis composiciones explorar prácticamente todas las posibilidades combinatorias en materia de timbres y de estilos (francés, italiano, alemán) que la orquesta de Cöthen le permitía. Cada concierto tiene una personalidad propia y ello supone un verdadero reto para el conjunto que los aborde, pues debe tener a su disposición trompas, trompeta oboes, flautas de pico, violas da gamba y violas de brazo, además de violines, violonchelos y continuo. Zéfiro, de la mano de Alfredo Bernardini, bien conocido aquí por sus actuaciones con la Orquesta Barroca de Sevilla, dio cumplida cuenta de las exigencias de estos conciertos. Se notó, y mucho, cuando Bernardini, como en el tercer concierto, se puso al frente para coordinar ese continuo ir y venir de frases entre violines, violas y chelos, consiguiendo un encaje perfecto a un tempo casi de moto perpetuo subyugante. Estupendos solistas en general, con la nota levemente discordante del violín de Elisa Citterio en el primer concierto, con un sonido áspero y quedándose atrás del grupo en el tercer tiempo. Estupendos oboes y soberbio el fagot de Alberto Grazzi, como brillante la trompeta de Cassone.
Estupenda galería de solistas y solidez del conjunto con un gran Bernardini al frente