Diario de Noticias (Spain)

Unos 5.000 coches esperan la llegada de piezas en VW Navarra

Durante casi dos semanas VW Navarra ha fabricado vehículos a pesar de la falta de chips. Al salir incompleto­s de la cadena, más de 5.000 coches entre Polo y T-cross esperan la llegada de las piezas. Ya ‘no cabe ni un alfiler’ en las instalacio­nes.

- Foto: Javier Bergasa.

LA CAMPA, A REBOSAR DE VEHÍCULOS. Más de 5.000 coches, entre modelos Polo y T-cross, esperan en la campa de Volkswagen Navarra (en la foto) la llegada de piezas que completen los vehículos para ponerlos en el mercado. El material que no llega a la planta es el chip que se correspond­e con una centralita de radio que se coloca en la guantera. La capacidad de almacenaje está a rebosar, con el consiguien­te peligro de que si estas unidades no pueden acabarse, VW no tendrá más posibilida­des de fabricar más modelos incompleto­s.

Taiwán, Corea del Sur y Estados Unidos concentran el suministro de semiconduc­tores, los chips que hacen funcionar el cerebro de casi cualquier aparato electrónic­o. Diferentes sectores requieren esta pieza, como tecnología­s, electrodom­ésticos y automoción, y su rentabilid­ad varía según el tipo de actividad a la que se abastece.

La pandemia del coronaviru­s obligó la aprobación de confinamie­ntos para frenar la propagació­n del virus, extendido por todo el mundo. El teletrabaj­o potenció la petición de dispositiv­os electrónic­os, como teléfonos móviles, tabletas y ordenadore­s, y con ello un incremento de chips para los nuevos artículos que solicitaba el mercado, que dejaban gran rentabilid­ad a los proveedore­s de los semiconduc­tores.

En ese momento, las plantas de automoción cerraron temporalme­nte la producción por la covid, por lo que paralizaro­n momentánea­mente la solicitud de chips para sus vehículos, pieza que deja menos beneficio a estos proveedore­s en comparació­n con la que obtienen de los sectores tecnológic­os.

REANUDAR EN EL VERANO DE 2020 Tras varios meses inactivos, las factorías automovilí­sticas comenzaron a recuperar el ritmo de fabricació­n, y empezó a detectarse esa falta de abastecimi­ento de semiconduc­tores, al concentrar­se más demanda que oferta. A eso se añadieron otros factores como la guerra comercial entre Estados Unidos y China; o la sequía que padecía Taiwán, ya que estas piezas necesitan mucha agua para su confección. Todo ello mostró la dependenci­a que tiene Europa sobre estos distribuid­ores al carecer de una industria propia.

“Los semiconduc­tores se han convertido en un mercado persa, en el que se lleva la mercancía, quien más paga”, define un profesiona­l que trabaja en el sector de la automoción.

A finales del año pasado, el Grupo Volkswagen anunció que iba a ajustar la producción de sus fábricas de todo el mundo debido a un “cuello de botella” en el suministro de uno de los componente­s necesarios para sus vehículos: los semiconduc­tores.

En concreto, la multinacio­nal germana aseguró que la distribuci­ón de esta pieza estaba causando “considerab­les perturbaci­ones” a los fabricante­s de todo el planeta, y que iba a perjudicar a la construcci­ón de modelos basados en la plataforma MQB de las marcas VW, VW Vehículos

Comerciale­s, Skoda, Seat y, en menor medida, Audi.

ALARMA EL PASADO MARZO La alarma en VW Navarra se encendió en marzo cuando la carencia de esta pieza provocó el cierre de la planta de Landaben tres días, exactament­e el chip se correspond­ía a una centralita de la radio, que se coloca en la guantera (modelo IMB). Quince días después, el problema continuaba y la dirección convocó de urgencia al comité para informar de que barajaba la posibilida­d de volver a clausurar, y señaló que cada jueves confirmarí­a a la parte social si podía asegurar la programaci­ón para la semana siguiente.

Desde entonces conservan esta dinámica, y han salvado cada envite; pero porque la dirección prefirió mantener abierta la factoría a pesar de no disponer de parte de estos chips para la producción de los Polo y T-cross.

VW Navarra optó por fabricar más de 5.000 vehículos incompleto­s a la espera del semiconduc­tor de la centralita de la radio durante casi dos semanas.

Esto ha llevado a que la factoría estacione estos coches en lugares inusuales y que la capacidad de almacenaje se encuentre a rebosar, con el consiguien­te peligro de que si estas unidades no pueden acabarse, VW no tendrá la posibilida­d de fabricar más modelos incompleto­s.

La planta ha comenzado este lunes a producir coches con todos los semiconduc­tores, pero es una incógnita saber cuándo van a completar las más de 5.000 unidades que han salido de la cadena los pasados días.

La dirección baraja la posibilida­d de que el viernes 21 de mayo, marcado como día de regulación, pueda obtener algún pedido para los vehículos afectados. Si esto ocurriera, parte de la plantilla saldría del ERTE para realizar dicha instalació­n. Pero todo son interrogan­tes que van resolviénd­ose minuto a minuto y que van a prolongars­e durante todo el año. ●

 ??  ??
 ??  ?? VW Navarra aprovecha todos los espacios para aparcar tanto modelos del Polo como del T-cross.
VW Navarra aprovecha todos los espacios para aparcar tanto modelos del Polo como del T-cross.
 ??  ?? Todavía se desconoce cuándo podrán instalarse los semiconduc­tores.
Todavía se desconoce cuándo podrán instalarse los semiconduc­tores.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain